El presidente chino, Xi Jinping, realizará una visita de Estado a Irán, dijo el jueves el Ministerio de Relaciones Exteriores de Pekín, al concluir un viaje de tres días a China del líder de la república islámica.
Pekín y Teherán reforzaron sus fuertes lazos económicos en 2021 con la firma de un “pacto de cooperación estratégica” de 25 años, pero han estado bajo la presión de las naciones occidentales por sus posiciones sobre la invasión rusa de Ucrania.
Irán también está sometido a estrictas sanciones estadounidenses por su programa nuclear.
Xi “aceptó encantado” una invitación del presidente Ebrahim Raisi para realizar un viaje a Irán, dijeron ambos países en un comunicado conjunto emitido el jueves.
No se dio ninguna fecha para la visita, que sería la primera de Xi a la nación de Oriente Medio desde 2016.
Irán acordó con las principales potencias mundiales en 2015 frenar su programa nuclear a cambio del levantamiento de sanciones punitivas. Pero el entonces presidente Donald Trump sacó a Estados Unidos del acuerdo en 2018 y volvió a imponer sanciones, lo que provocó que Teherán diera marcha atrás en sus compromisos.
Los esfuerzos para revivir el acuerdo se han estancado durante meses, y Estados Unidos e Israel siguen acusando a Irán de tratar de construir armas nucleares, una afirmación que niega. Irán ha incrementado el enriquecimiento de uranio hasta alcanzar niveles de pureza próximos al armamento y, en enero, el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) advirtió de que dispone de material suficiente para fabricar “varias” armas.
A principios de este mes, el OIEA llamó al orden a Teherán tras observar un cambio en el modo de funcionamiento para enriquecer uranio al 60 por ciento en la planta subterránea de Fordo, del que no se había informado anteriormente. Ese nivel de pureza es un corto paso técnico desde el uranio apto para armas.
Pekín y Teherán pidieron el jueves el fin de las sanciones, culpando de las tensiones actuales a la “retirada unilateral” de Washington del acuerdo.
“Ambas partes hicieron hincapié en que el levantamiento de las sanciones y la garantía de los dividendos económicos de Irán son un componente importante del acuerdo”, afirmaron en el comunicado conjunto.
“Todas las sanciones pertinentes deben ser abolidas por completo de manera verificable, promoviendo la aplicación plena y efectiva del acuerdo”, señalaron.
Solidaridad
Pekín desplegó la alfombra roja para la llegada de Raisi el martes, y el líder iraní fue acompañado por una amplia delegación comercial y financiera en la primera visita de este tipo en más de 20 años.
Más tarde, Xi alabó la “solidaridad y cooperación” de China con Irán “ante los complejos cambios actuales en el mundo, la época y la historia”, informó la cadena estatal china CCTV.
Pekín “apoya a Irán en la salvaguarda de la soberanía nacional, la independencia, la integridad territorial y la dignidad nacional… y en la resistencia al unilateralismo y al hegemonismo”, dijo Xi, según la CCTV.
China “se opone a que fuerzas externas interfieran en los asuntos internos de Irán y socaven su seguridad y estabilidad”, añadió.
Las dos partes firmaron varios documentos de cooperación bilateral en los ámbitos de la agricultura, el comercio, el turismo, la protección del medio ambiente, la sanidad, la ayuda en caso de catástrofe, la cultura y el deporte, informó CCTV.