El FBI encontró pruebas que vinculan a Al Qaeda con un tiroteo en la Base Naval de los Estados Unidos en Florida el 6 de diciembre de 2019, en el que murieron tres personas, dijo el lunes una fuente de la policía federal.
El tirador, el subteniente Mohammed Said Alshamrani, de 21 años, sirvió en la Real Fuerza Aérea Saudí.
Estaba en la base como parte de un programa de entrenamiento de la Marina de los EE.UU. destinado a fortalecer los lazos con los aliados extranjeros. Fue abatido por la policía durante el ataque.
Desde entonces, el Departamento de Justicia ha estado trabajando para tratar de desbloquear la encriptación del teléfono del tirador para comprender mejor sus motivos y si tenía vínculos con grupos terroristas conocidos.
Ahora, el FBI confirmó que el presunto atacante, que estaba recibiendo formación de las fuerzas estadounidenses, se comunicó con miembros de Al Qaeda que lo alentaron a cometer los ataques, según fuentes conocedoras citadas por la cadena CNN y el periódico The New York Times.
En febrero, una grabación de audio que supuestamente pertenecía al grupo militante islamista Al Qaeda en la Península Arábiga se atribuyó la responsabilidad del ataque mortal en la base de Pensacola, en Florida, en diciembre, en el que murieron tres personas, pero no aportó ninguna prueba.
Antes del tiroteo, el tirador también criticó las guerras de Estados Unidos y citó al líder de al-Qaeda Osama bin Laden, que fue asesinado en sitios de medios sociales.