El Buró Federal de Investigaciones (FBI) despidió a agentes que aparecieron en fotografías arrodillados en una protesta tras la muerte de George Floyd en 2020 mientras era detenido por policías de Minneapolis, según tres personas con conocimiento del caso. Las fuentes, que solicitaron anonimato para tratar asuntos internos con The Associated Press, confirmaron la medida sin precisar todos los detalles.
La oficina había reasignado a los agentes en la primavera pasada y después ejecutó los despidos, de acuerdo con esas personas. Dos de ellas estimaron en aproximadamente 20 el número de empleados afectados, aunque no existe aún una cifra oficial. Las fuentes destacaron que el proceso disciplinario se realizó de forma gradual y terminó con la separación definitiva de los agentes.
Las fotografías muestran a un grupo de agentes arrodillados durante una de las manifestaciones posteriores a la muerte de Floyd en mayo de 2020. Ese hecho provocó un debate nacional sobre la actuación policial y la “injusticia racial” en Estados Unidos. El gesto de arrodillarse generó rechazo en algunos miembros del FBI y se evaluó como posible táctica de desescalada en medio de protestas masivas.
La Asociación de Agentes del FBI confirmó en un comunicado el despido de más de una docena de agentes, entre ellos veteranos militares con protecciones legales adicionales. La organización calificó la medida como ilegal, pidió al Congreso que investigue y atribuyó la decisión al director del FBI, Kash Patel, a quien responsabilizó de vulnerar derechos legales de empleados de la agencia.
“Como el director Patel ha reiterado, nadie está por encima de la ley”, afirmó la asociación. “Pero en lugar de brindar a estos agentes un trato justo y el debido proceso, Patel optó por violar la ley nuevamente al ignorar sus derechos constitucionales y legales en vez de seguir el proceso requerido”. Un portavoz del FBI declinó formular comentarios sobre el caso.
