Durante una conferencia de prensa en Jerusalén, el ministro de Asuntos Exteriores francés, Jean-Noel Barrot, reiteró el pedido que hizo la semana pasada el presidente francés, Emmanuel Macron, de imponer un embargo de armas a Israel.
“Hoy, para garantizar la seguridad de Israel, para garantizar la seguridad de los israelíes, el uso de la fuerza debe dar paso al uso del diálogo y de la diplomacia”, afirma.
“Por eso Francia, como la mayoría de los países del mundo, pide un alto el fuego tanto en Gaza como en Líbano. Y cuando pedimos un alto el fuego, no podemos al mismo tiempo proporcionar armas ofensivas a los beligerantes. Es una cuestión de coherencia”.