Las autoridades han arrestado al ex presidente iraní Mahmoud Ahmadinejad por presuntamente «incitar al malestar contra el gobierno», informó el sábado el diario londinense Al-Quds Al-Arabi, citando fuentes confiables en Teherán.
El periódico dijo que Ahmadinejad, durante una visita a la ciudad occidental de Bushehr el 28 de diciembre, dijo: «Algunos de los líderes actuales viven separados de los problemas y preocupaciones de la gente, y no saben nada sobre la realidad de la sociedad».
Supuestamente agregó que Irán estaba sufriendo de «mala administración» y que el gobierno del presidente Hassan Rouhani «cree que es dueño de la tierra y que la gente es una sociedad ignorante».
Según Al-Quds Al-Arabi, los comentarios de Ahmadinejad, que se produjeron cuando las protestas contra el gobierno por la economía se estaban calentando, llevaron a su arresto.
El periódico dijo que las autoridades ahora intentan imponer arresto domiciliario al ex presidente.
Por su parte, el diario israelí The Times of Israel dijo que intentó sin éxito, corroborar de manera independiente el informe.
La televisión estatal de Irán mostró el sábado manifestaciones en pro del régimen islámico en varias ciudades, comenzando con Amol, en la provincia norteña de Mazandaram, con cientos de personas ondenado la bandera iraní y entonaban consignas contra Estados Unidos e Israel.
La televisión estatal describió la manifestación como una «respuesta a los alborotadores y partidarios de los disturbios». Otras manifestaciones progubernamentales se llevaron a cabo en Shahin Dezh, en la provincia de Azarbaijan, al oeste de Turquía; la ciudad de Semnan, en el norte de la provincia de Semnan; y Shadegan, en la provincia sureña de Khouzestan, cerca de Iraq.
Los mítines pretenden ser una muestra de fuerza contra las protestas antigubernamentales que estallaron en Mashhad, la segunda ciudad más grande de Irán, el 28 de diciembre, y desde entonces se han extendido a varias otras ciudades y pueblos. Las protestas fueron provocadas por un alza en los precios de los alimentos en medio del aumento del desempleo. Algunos manifestantes han pedido el derrocamiento del gobierno.
Al menos 21 personas han sido asesinadas, y cientos han sido arrestados por los Guardianes Revolucionarios. Se han realizado grandes concentraciones progubernamentales en respuesta, y los funcionarios han culpado a los disturbios antigubernamentales de la intromisión extranjera, un panorama que se asemeja a lo que acontece del otro lado del mundo, en Venezuela.