Jordania ha cerrado un acuerdo con un consorcio encabezado por inversores franceses para la construcción de una planta de desalinización que se perfila como una de las más grandes a nivel mundial.
Según la agencia oficial de noticias Petra, este proyecto ha sido calificado como el mayor de infraestructura en la historia del país. El primer ministro Jafar Hassan informó al Parlamento que la inversión se estima en más de 5 mil millones de dólares.
La iniciativa está siendo liderada por Meridiam, un experto francés en infraestructura, en colaboración con SUEZ, Orascom Construction y VINCI Construction Grands ProCazas.
De acuerdo con la información publicada en su página web, Meridiam destaca que el proyecto proporcionará más de 300 millones de metros cúbicos de agua potable a las ciudades de Ammán y Aqaba, lo que beneficiará a más de tres millones de personas.
El plazo estimado para la finalización del proyecto es de cuatro años, según lo confirmado por el primer ministro el mes pasado.
Este acuerdo se produce tras la retirada de Jordania en 2021 de un pacto firmado en 2013 por Jerusalén, Ammán y Ramallah, que tenía como objetivo conectar el mar muerto con el mar Rojo a través de una red de tuberías en territorio jordano.