Las autoridades policiales de Canadá informaron el viernes que capturaron a tres hombres por intentos de secuestro con víctimas judías y mujeres, además de cargos por terrorismo. La investigación apunta a una serie de hechos recientes que, según la policía, siguieron un patrón de selección por identidad.
Los detenidos son Waleed Khan, de 26 años, Osman Azizov, de 18, y Fahad Sadaat, de 19, todos residentes de Toronto. El caso tomó forma tras dos episodios ocurridos a comienzos de este año, que activaron pesquisas y vigilancia sobre el mismo grupo por parte de la policía.
En mayo, en Toronto, tres hombres se aproximaron a una mujer; uno portaba una pistola y otro un cuchillo. Intentaron obligarla a subir a un vehículo. La operación fracasó por la intervención de un conductor que pasaba, y los agresores escaparon, indicó la policía en un comunicado oficial.
En junio, en la cercana Mississauga, tres sujetos bajaron de un vehículo con una pistola, un rifle y un cuchillo. Persiguieron a dos mujeres por la vía pública. Un automovilista intervino y cortó la persecución; los atacantes dejaron el lugar de inmediato, señaló la policía.
El jefe policial de Toronto, Myron Demkiw, afirmó que estaban “atacando a mujeres y miembros de la comunidad judía”, sin añadir precisiones. Tras registros, la policía halló armas de fuego, munición y cargadores de alta capacidad; “Los investigadores también descubrieron vínculos con el terrorismo”. Una orden de silencio impidió detalles.
Los imputados acumulan 79 cargos, entre ellos conspiración para secuestro y toma de rehenes, posesión de armas, agresión sexual, robo de vehículos y falsificación. La Real Policía Montada de Canadá federal sumó a Khan delitos de terrorismo por vínculos con ISIS, incluida conspiración para cometer asesinato para un grupo terrorista.
Estas detenciones coincidieron con un clima de temor en comunidades judías de la diáspora, tras la masacre antisemita en Australia la semana pasada. La policía recordó que los tiradores de ese ataque terrorista llevaban banderas del ISIS en sus vehículos, un detalle que amplificó la alarma pública.
Noah Shack, líder del grupo paraguas The Centre for Israel and Jewish Affairs, lanzó esta advertencia: “Como vimos en Sídney, estamos a un fallo de inteligencia de una pérdida devastadora de vidas. La falta de urgencia por parte de nuestros líderes pone en peligro a los canadienses”.
Shack agregó otra exigencia para las instituciones del país: “Instamos a las autoridades a tomar medidas decisivas para responsabilizar a los extremistas por radicalizar a los canadienses y preparar el terreno para la violencia masiva aquí mismo en nuestro país”, sostuvo el dirigente comunitario tras conocerse las detenciones.
El año pasado, un padre y su hijo, que entraron en Canadá como solicitantes de asilo, fueron arrestados por planear un ataque masivo en nombre del ISIS en Toronto. Ese mismo año, un paquistaní con visado cayó en Quebec por un plan inspirado por ISIS contra judíos en Nueva York.
En Canadá, el antisemitismo creció en los últimos años, incluso antes de la invasión de Hamás a Israel el 7 de octubre de 2023. Esa ofensiva abrió la guerra en Gaza; después, los crímenes de odio contra la población judía subieron a niveles astronómicos, según autoridades y organizaciones.
