Los legisladores republicanos y demócratas de Estados Unidos presionaron al presidente Donald Trump el jueves para imponer sanciones a Turquía por la compra de un sistema de defensa de misiles ruso, y dijo que debería cumplir una ley que impone sanciones por hacer negocios con el ejército ruso.
Los senadores republicanos Rick Scott y Todd Young presentaron una resolución pidiendo sanciones luego de que Ankara comenzó a aceptar la entrega de un avanzado sistema de defensa de misiles ruso la semana pasada, lo que llevó a la Casa Blanca a anunciar que retiraría a Turquía del programa de aviones de combate F-35.
Por separado, el senador Bob Menéndez, el principal demócrata en el Comité de Relaciones Exteriores del Senado, dijo que eliminar a Turquía del programa de aviones no era suficiente. “La ley establece claramente sanciones para las transacciones importantes con los sectores de defensa e inteligencia de la Federación Rusa, que incluirían claramente la entrega de un sistema S-400”, dijo en un comunicado enviado por correo electrónico.
Pero la administración de Trump no ha impuesto sanciones a Turquía, a pesar de la amplia ley de sanciones de 2017, conocida como CAATSA. Trump no ha sido claro si su administración está considerando hacerlo.
De ser aprobada, la resolución de Scott y Young exigiría “la implementación total de las sanciones en virtud de CAATSA”, describiendo la compra por parte de Turquía del sistema de defensa aérea y de misiles S-400 como una “amenaza directa y grave” para los intereses de seguridad de los Estados Unidos.
CAATSA ordena que el presidente elija cinco de un rango de 12 sanciones, desde prohibir visas y negar el acceso al Export-Import Bank con sede en EE. UU. a opciones más duras, como prohibir transacciones con el sistema financiero de EE. UU. y denegar licencias de exportación.
Sin embargo, CAATSA no establece ningún plazo para imponer sanciones o emitir una exención, por lo que Trump podría demorarse indefinidamente.
La resolución insta a la administración a convocar conversaciones en la OTAN para discutir las amenazas planteadas por Rusia y reflexionar sobre la continua inclusión de Turquía en la OTAN.
Si bien la resolución no vinculante no tendría fuerza de ley, la aprobación de una medida de este tipo en el Senado controlado por los republicanos podría aumentar la presión sobre Trump para acabar con Ankara.
Menéndez dijo que introduciría una legislación que obligaría a la administración a sancionar a Turquía si Trump se niega a hacerlo bajo la ley CAATSA.