El primer ministro del Líbano, Saad Hariri, indicó el martes que su nuevo Gobierno permitiría al grupo terrorista Hezbolá mantener sus armas, que se han utilizado con frecuencia para amenazar a Israel.
Los miembros del Parlamento del Líbano comenzaron a discutir la declaración de política del nuevo Gobierno, que se centra en mejorar las condiciones económicas del país.
La declaración dice que los ciudadanos libaneses tienen el derecho de «resistir a la ocupación israelí y repeler su agresión«, en referencia al derecho del grupo terrorista respaldado por Irán a mantener sus armas.
Según la resolución 1701 de la ONU, que puso fin a la Segunda Guerra del Líbano de 2006 entre Israel y Hezbolá, el Líbano se comprometió a desarmar al grupo terrorista respaldado por Irán.
Hariri comenzó la reunión leyendo la declaración de política, que exige reformas en las finanzas estatales, la economía y el sector eléctrico en crisis, que cuesta a las arcas estatales unos $ 2 mil millones al año.
La declaración enfatizó «la necesidad de que el Líbano se aleje de los conflictos externos y respete la Carta de la Liga Árabe, y la adopción de una política exterior independiente basada en el interés supremo del Líbano y el respeto por el derecho internacional para preservar al país como un foro de paz”, según el sitio web de Naharnet.
El nuevo gabinete fue anunciado a fines del mes pasado, rompiendo un punto muerto de nueve meses que había profundizado los problemas económicos del Líbano.
Grupos políticos rivales en el Líbano habían estado encerrados en desacuerdo sobre la composición de un nuevo Gobierno desde mayo, después de las primeras elecciones parlamentarias del país en nueve años. Un gran avance se hizo posible el mes pasado después de semanas de acuerdos de trastienda, a medida que aumentaban los problemas económicos del Líbano.
El nuevo Gobierno está encabezado por Hariri, el político sunita respaldado por Occidente que ha ocupado el cargo desde 2016. Pero Hezbolá, el poderoso grupo chiíta respaldado por Irán, logró importantes avances a expensas del mayor partido sunita y ahora controla tres ministerios gubernamentales.
El gobierno del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, expresó su preocupación por el hecho de que Hezbolá ocupe tres cargos en el gabinete y pidió al nuevo gobierno que se asegure de que el grupo no reciba apoyo de los recursos de los ministerios.
Hezbolá se formó en 1982 bajo la dirección del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán para combatir a Israel. Ha sido la inversión más exitosa de Irán en el exterior, sirviendo como el brazo de la República Islámica en la puerta de Israel.
El grupo domina el panorama político y militar del Líbano y posee decenas de miles de combatientes entrenados, así como una variedad de armamentos sofisticados. Su intervención en Siria del lado del presidente Bashar Assad también expandió su influencia y alcance en la región.
En Líbano, Hezbolá sigue siendo la fuerza armada sin rival, también logrando importantes avances políticos junto con los aliados en las últimas elecciones parlamentarias. Esto posicionó al grupo para asegurar tres cargos ministeriales en el nuevo gobierno, incluido el poderoso Ministerio de Salud, que tiene uno de los presupuestos más grandes del país.