El banco central del Líbano prohibió a todas las instituciones financieras autorizadas establecer vínculos directos o indirectos con Al-Qard Al-Hassan, entidad respaldada por Irán y vinculada a Hezbolá. La instrucción figura en una circular a la que accedió Reuters, en la que se establece la restricción sin excepciones para cualquier operación financiera o cooperación institucional con dicha entidad.
El Departamento del Tesoro de Estados Unidos impuso sanciones a Al-Qard Al-Hassan en 2007, al alegar que Hezbolá utilizó esta institución como mecanismo para gestionar operaciones financieras y obtener acceso al sistema bancario internacional. Las sanciones fueron justificadas por consideraciones relacionadas con actividades vinculadas al financiamiento del terrorismo.
Fundada en 1983, Al-Qard Al-Hassan se presenta como una organización benéfica dedicada a ofrecer préstamos personales conforme a preceptos islámicos, los cuales prohíben el cobro de intereses. La institución mantiene operaciones activas bajo licencia emitida por el gobierno libanés.
Durante la última confrontación entre Israel y Hezbolá, las Fuerzas de Defensa de Israel atacaron infraestructuras pertenecientes a Al-Qard Al-Hassan, al considerar que dichas instalaciones servían como apoyo logístico o financiero para el grupo terrorista.
Actualmente, la organización mantiene más de treinta sucursales distribuidas principalmente en zonas de mayoría chiita, como el sur de Beirut, el sur del Líbano y el valle de Beqaa. La mayoría de sus operaciones se concentran en estas regiones, donde dispone de una red estructurada de servicios financieros.