Casi 2.000 agentes de policía estarán de servicio hoy, cuando se espera que más de 100.000 partidarios propalestinos marchen por Londres para protestar contra Israel por la guerra en Gaza contra Hamás, con poderes adicionales para proteger los monumentos que honran a los muertos de guerra británicos.
En los últimos fines de semana se han celebrado marchas propalestinas y antiisraelíes en la capital británica, y la policía ha practicado casi 100 detenciones por delitos como apoyo a organizaciones prohibidas y delitos graves de odio.
Pero la marcha de hoy promete ser más tensa, ya que coincide con el Día del Armisticio, que conmemora a los caídos en el conflicto desde la Primera Guerra Mundial.
El primer ministro, Rishi Sunak, hizo un llamamiento tardío a favor de las manifestaciones pacíficas
“Gracias a quienes lucharon por este país y por la libertad que apreciamos, quienes deseen protestar pueden hacerlo, pero deben hacerlo respetuosa y pacíficamente”, declaró Sunak en un comunicado hecho público anoche.
Será un fin de semana “especialmente difícil y tenso”, declaró ayer en una rueda de prensa Laurence Taylor, subcomisario de la Policía Metropolitana que dirige la operación del sábado.
Calculó que más de 100.000 personas participarían en la marcha, y que los organizadores cambiarían la ruta para asegurarse de que no pasara por ningún monumento emblemático.
Sin embargo, la policía dijo que en actos anteriores se habían producido “pequeñas fugas de grupos” y que “su comportamiento ha ido en aumento y se ha vuelto más violento”.
En consecuencia, se colocarán barreras metálicas alrededor de la zona en la que se encuentran los monumentos conmemorativos más significativos, y la policía podrá detener a cualquier manifestante que intente reunirse allí.
El monumento conmemorativo del Cenotafio —el punto central de las conmemoraciones— contará con una presencia policial constante hasta que concluyan los actos conmemorativos del domingo, informó Scotland Yard.