Bielorrusia está trabajando en la obtención de nuevos préstamos de Rusia en medio de las sanciones que han cortado su economía de las principales fuentes de divisas.
Minsk está negociando un nuevo préstamo gubernamental, así como fondos adicionales del Fondo Euroasiático para la Estabilización y el Desarrollo, financiado en un 90% por Rusia, dijo el viceprimer ministro primero de Bielorrusia, Nikolai Snopkov.
“El importe total de los fondos solicitados es de 3.500 millones de dólares”, dijo en una reunión con el dictador bielorruso Alexander Lukashenko. Los nuevos préstamos rusos “compensarán la pérdida de dinero europeo para refinanciar la deuda”, dijo Snopkov.
En 2022, Bielorrusia tendrá que devolver 3.300 millones de dólares de préstamos extranjeros, y en 2023 – 4.700 millones de dólares junto con el pago de intereses.
Al mismo tiempo, la entrada de divisas en la economía bielorrusa se está desplomando debido a las sanciones. La UE ha detenido las importaciones de todos los productos petrolíferos bielorrusos, y Estados Unidos ha introducido medidas contra el productor bielorruso de potasa Belaruskali, prohibiendo a su brazo comercial (Belarusian Potash Company, BPC) las transacciones en dólares.
Además, el quinto paquete de sanciones afectó a la deuda nacional bielorrusa, cerrando por completo la puerta de Lukashenko a los mercados mundiales de capitales.
Como resultado, hubo un “riesgo directo para la capacidad de refinanciación de los préstamos, incluso para el endeudamiento nacional”, dijo Snopkov.
La mayoría de las organizaciones financieras internacionales se negaron a cooperar con Bielorrusia. Minsk no tiene otras opciones para atraer fondos de inversión, dijo Snopkov a Lukashenko, y añadió que “la única fuente de desarrollo y crecimiento económico son los recursos internos y las reservas internas”.
El volumen de estas reservas en términos de divisas es insignificante. El 1 de diciembre, el Banco Nacional de Bielorrusia informó de que tenía 8.744 millones de dólares en reservas de oro. Al mismo tiempo, más de la mitad de las reservas de divisas está en oro y activos no líquidos, y sólo la mitad, 3.944 millones de dólares, está en efectivo. Este dinero apenas alcanza para un año de pagos de préstamos extranjeros.
El 10 de diciembre, Lukashenko mantuvo otra conversación telefónica con el presidente ruso, Vladimir Putin, y, según su servicio de prensa, hablaron de los “nuevos retos para los dos países”.
Un día antes, Putin condenó las declaraciones de que Bielorrusia estaba “en la nómina de Rusia”, calificándolas de incorrectas e inadmisibles.
Putin dijo que la creación del Estado de la Unión era un proceso largo y delicado que requería una competencia excepcional.
El pasado mes de agosto, Putin entregó 1.500 millones de dólares a Lukashenko, cuyo régimen estuvo a punto de colapsar tras las protestas en respuesta a unas elecciones no reconocidas por Occidente. En 2021, Bielorrusia recibió otros 1.000 millones de dólares en préstamos de Rusia y aplazó el pago de antiguas deudas.