La ONU ha tomado medidas para evitar una posible catástrofe ecológica en el mar Rojo al adquirir un buque para extraer petróleo de un antiguo superpetrolero llamado FSO Safer.
La plataforma flotante de almacenamiento lleva atrapada frente a las costas de Yemen desde 2015 y contiene más petróleo que el desastre del Exxon Valdez de 1989.
La situación es extremadamente peligrosa y el FSO Safer podría explotar, romperse o derramarse, causando graves daños a las ciudades costeras, la vida marina y el comercio internacional.
Durante años, los Hutís, que controlan la zona, impidieron el acceso a expertos en salvamento. Solo permitieron la descarga del petróleo con la condición de conservar los derechos sobre el recurso. Sin embargo, en el año pasado, la ONU logró finalmente negociar el acceso al FSO Safer y SMIT, una empresa de salvamento marítimo, se encargará de limpiar y preparar la plataforma para su remolque.
La operación es considerada “extremadamente difícil y compleja” y podría haber costado 20.000 millones de dólares de haberse producido un vertid. La ONU ha buscado financiación durante mucho tiempo para poder llevar a cabo la operación y finalmente ha adquirido el buque necesario para extraer el petróleo del FSO Safer. El nuevo buque llegará a la plataforma en mayo para comenzar la extracción del petróleo.
El profesor Maoz Fine, experto en corales del mar Rojo, ha declarado que la operación debe realizarse cuanto antes para eliminar la amenaza de una marea negra. Si todo el petróleo se derramara en el mar, podría causar un daño irreparable a los arrecifes de coral del mar Rojo, a la vida marina y a las economías locales.
La adquisición del buque es una buena noticia para todos los que han estado preocupados por la amenaza que representa el FSO Safer y la ONU espera que la operación se lleve a cabo con éxito para proteger el medio ambiente y las comunidades costeras.