El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha solicitado a la Fiscalía general de la Nación que investigue la adquisición del software espía Pegasus por un valor de 11 millones de dólares. Según el mandatario, este sistema podría haber sido utilizado para espiar a miembros de la oposición durante el gobierno anterior.
A lo largo de la última década, se ha detectado en varias ocasiones que tecnologías como Pegasus han sido empleadas para intervenir ilegalmente los teléfonos de activistas de la sociedad civil, políticos opositores y periodistas. Este software, desarrollado por la empresa israelí NSO, ha sido identificado en los dispositivos de múltiples personas a nivel global, incluidas aquellas que defienden los derechos humanos.
Durante una transmisión televisiva, Petro expresó su inquietud sobre el modo en que se llevó a cabo la transacción: “¿Cómo es posible que 11 millones de dólares en efectivo salgan del país en un avión, o dos, desde oficinas estatales… para ir a Israel a comprar software que espía teléfonos celulares, comunicaciones privadas, política, quizás durante meses?”, cuestionó el presidente, haciendo referencia a documentos que detallan la compra realizada por la Unidad de Información y Análisis Financiero (UIAF).
El mandatario también planteó interrogantes sobre si él u otros políticos habrían sido blanco de estos seguimientos y bajo qué justificación legal se habrían realizado tales acciones. Ante estas preocupaciones, Petro ha solicitado tanto al director de la UIAF como al jefe de la Policía que entreguen a la Fiscalía los documentos y el software en cuestión, con el fin de garantizar que los derechos de los ciudadanos no sean vulnerados por el Estado.
“Es fundamental llegar al fondo del asunto”, concluyó Petro, subrayando la importancia de la investigación para asegurar la protección de los derechos civiles en Colombia.