El Dr. Ashok Philip, presidente de la Asociación Médica Mundial, expresó una firme condena al ataque con misiles balísticos iraníes contra el Centro Médico Soroka en Beersheba. La agresión, calificada como “deliberada”, generó severos daños estructurales y obligó a suspender la mayoría de los servicios hospitalarios.
El Centro Médico Soroka, uno de los principales hospitales de Israel, atiende a más de un millón de personas en el sur del país. “Este hospital de traumatología de nivel 1 presta servicios esenciales a comunidades vulnerables”, destacó Philip.
La ofensiva vulnera el derecho internacional humanitario, según el cual los centros de salud constituyen espacios protegidos. “Atacar un hospital representa una grave infracción a la Convención de Ginebra”, afirmó Philip. “Ningún ataque contra estas instalaciones es justificable”.
La comunidad médica internacional debe reforzar su compromiso con la neutralidad, subrayó Philip. “Es imperativo garantizar la seguridad de los profesionales de la salud en contextos de conflicto”, señaló.
En nombre de la Asociación Médica Mundial, Philip manifestó su apoyo al personal del hospital afectado. “Expresamos nuestra solidaridad con los colegas del Centro Médico Soroka”, concluyó.