El primer ministro interino del Líbano, Najib Mikati, declaró en un discurso televisado que su país “no tenía otra opción que la opción diplomática”, al ser consultado sobre los esfuerzos para poner fin a los combates entre Israel y el grupo terrorista Hezbolá.
Mikati destacó que la intensificación de la guerra podría haber obligado a hasta un millón de personas a desplazarse dentro del país, lo que posiblemente constituya la peor crisis de desplazamiento en la historia del Líbano.
“Es el mayor movimiento de desplazamiento que haya ocurrido jamás… en el Líbano”, afirmó el primer ministro interino, añadiendo que “el número estimado es muy alto y puede llegar a un millón”, lo cual representaría aproximadamente una sexta parte de la población libanesa.