El primer ministro libanés, Najib Mikati, dijo a Al Jazeera que ha “recibido garantías estadounidenses” de que se reducirán los ataques israelíes en Beirut.
Los medios de comunicación hebreos informaron en los últimos días de que la presión estadounidense había llevado a Israel a reducir los ataques contra objetivos de Hezbolá en la capital libanesa. Esto fue rechazado por los funcionarios israelíes, que insisten en que Jerusalén conserva la libertad de operar según sea necesario.
Mikati añade que su gobierno quiere un alto el fuego y “la implementación de la Resolución 1701 de la ONU”, lo que requeriría poner fin a la presencia de Hezbolá al sur del río Litani.