Israel obtiene beneficios tras la caída del régimen de Bashar al-Assad en Siria, según declaraciones del presidente ruso, Vladimir Putin. Además, expresó dudas sobre los planes israelíes de retirar tropas de la zona de amortiguación tras la estabilización de la situación.
El mandatario ruso criticó la apropiación de territorios sirios por parte de Israel y manifestó desconfianza en sus intenciones de abandonar las posiciones ocupadas. Según Putin, no hay señales claras de que Israel planee cumplir con la retirada prometida.
En su conferencia anual de fin de año, Putin afirmó que Rusia espera que Israel deje en algún momento el territorio sirio.
Sin embargo, denunció que actualmente se están enviando más tropas israelíes a la región. Las fuerzas israelíes ocuparon una zona fronteriza de contención después de la caída de Assad, alegando que la medida es provisional hasta que se confirme la ausencia de amenazas y la estabilidad en Siria.