MOSCÚ, 21 feb (Reuters) – El presidente ruso, Vladimir Putin, reconoció el lunes dos regiones escindidas del este de Ucrania como entidades independientes, subiendo la apuesta en una crisis que Occidente teme que pueda desencadenar una gran guerra.
En un largo discurso televisado, Putin describió a Ucrania como una parte integral de la historia de Rusia y dijo que el este de Ucrania era una antigua tierra rusa y que confiaba en que el pueblo ruso apoyaría su decisión.
Putin anunció su decisión en llamadas telefónicas a los líderes de Alemania y Francia, que expresaron su decepción, dijo el Kremlin, y más tarde fue mostrado en la televisión estatal firmando el decreto.
La medida de Moscú podría torpedear un intento de última hora de celebrar una cumbre con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, para evitar que Rusia invada Ucrania, y el rublo amplió sus pérdidas mientras Putin hablaba del tema, cayendo un 3,3 % en el día, hasta 79,83 por dólar.
Putin pronunció un largo discurso televisado que terminó con su anuncio, ahondando en la historia desde el imperio otomano y tan reciente como las tensiones sobre la expansión de la OTAN hacia el este, un irritante clave para Moscú en la crisis actual.
“Considero necesario tomar una decisión que debería haberse tomado hace mucho tiempo: reconocer inmediatamente la independencia y la soberanía de la República Popular de Donetsk y la República Popular de Luhansk”, dijo Putin.
Anteriormente, dijo que “si Ucrania entrara en la OTAN sería una amenaza directa para la seguridad de Rusia”.
Putin lleva años trabajando para restaurar la influencia de Rusia sobre las naciones que surgieron tras el colapso de la Unión Soviética, y Ucrania ocupa un lugar importante en sus ambiciones.
Rusia niega cualquier plan para atacar a su vecino, pero ha amenazado con una acción “técnico-militar” no especificada a menos que reciba amplias garantías de seguridad, incluida la promesa de que Ucrania nunca entrará en la OTAN.
El reconocimiento de las zonas controladas por los rebeldes podría allanar el camino para que Moscú envíe fuerzas militares a las dos regiones separatistas -Donetsk y Luhansk- abiertamente y argumente que está interviniendo como aliado para protegerlas contra Ucrania.
Un parlamentario ruso y antiguo dirigente político de Donetsk, Alexander Borodai, ha dicho que los separatistas buscarían entonces a Rusia para que les ayudara a hacerse con el control de las partes de las dos regiones que aún están bajo el dominio de las fuerzas ucranianas.