La congresista demócrata Rashida Tlaib calificó ayer miércoles al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, de “maníaco genocida” en un post de Instagram.
“Cada miembro del Congreso que se sienta con este asesino está apoyando a un criminal de guerra”, escribió Tlaib. “Nunca jamás olvidaremos”.
En un segundo post, Tlaib declaró que está “tan harta y cansada de que nuestro país financie y apoye un genocidio y una guerra contra los niños”.
“Por favor, no dejéis de hablar de Palestina”, decía en el post, que incluía un vídeo en el que supuestamente aparecía un bebé árabe palestino muerto.
Las últimas declaraciones antiisraelíes de Tlaib parecen ir dirigidas al representante Josh Gottheimer, demócrata por Nueva Jersey, que visitó Israel la semana pasada para mostrar su solidaridad con el Estado judío tras la masacre de Hamás del 7 de octubre.
Gottheimer escribió en X (antes Twitter): “Nuestros objetivos son claros: Estados Unidos debe apoyar a Israel para que todos los rehenes regresen a casa, incluidos los estadounidenses, eliminar a los terroristas y proporcionar la tan necesaria ayuda humanitaria a los civiles palestinos inocentes que Hamás utiliza como escudos humanos”.
Tlaib, la única estadounidense de origen palestino en el Congreso, siempre ha sido muy crítica con Israel y ha sido acusada de antisemita. En múltiples ocasiones se ha negado a condenar la masacre del 7 de octubre, mientras que ha condenado repetidamente la respuesta de Israel al peor atentado terrorista de su historia y la peor masacre del pueblo judío desde el Holocausto.
En noviembre, la Cámara de Representantes votó a favor de censurar a Tlaib por un vídeo que publicó en X en el que se coreaba “Del río al mar, Palestina será libre”, un llamamiento a la destrucción del Estado de Israel y de sus habitantes judíos entre el río Jordán y el mar Mediterráneo. 22 demócratas votaron con 212 republicanos para censurar a Tlaib.
Esta semana, la organización StopAntisemitism anunció que Tlaib era una de sus tres finalistas a “Antisemita del Año” junto con la influencer Gigi Hadid y el líder de Hamás Ismail Haniyeh, uno de los autores intelectuales de la masacre del 7 de octubre.