MOSCÚ, RUSIA – El ministro de Defensa ruso Serguéi Shoigu presentó condecoraciones estatales a los pilotos de los cazas Su-27, que se pusieron en vuelo esta semana a causa de un dron estadounidense sobre el Mar Negro. El organismo dijo que los pilotos impidieron la violación de “los límites de la zona de uso temporal del espacio aéreo”.
El 14 de marzo, el ministro de Defensa, Sergei Shoigu, concedió condecoraciones estatales a los pilotos de los cazas Su-27 que despegaron por detrás de un dron estadounidense sobre el Mar Negro, informó el ministerio en su canal de Telegram.
El Ministerio de Defensa señaló que los pilotos “impidieron la violación” por parte del dron estadounidense de los “límites de la zona del régimen temporal de uso del espacio aéreo” establecido para llevar a cabo una “operación militar especial”. Al mismo tiempo, la agencia subrayó que los cazas rusos no utilizaron armas aéreas, no entraron en contacto con el dron y regresaron sanos y salvos al aeropuerto de su base.
El accidente del avión no tripulado de reconocimiento MQ-9 en el Mar Negro fue comunicado por el Mando Europeo [EUCOM] en la noche del 14 de marzo. Según la parte estadounidense, el Su-27 ruso golpeó la hélice del dron, tras lo cual fue inundado por los estadounidenses en aguas internacionales. Estados Unidos afirma que los cazas rusos llevaron a cabo una interceptación “insegura y poco profesional” de un dron que realizaba misiones en el espacio internacional.
El 16 de marzo, el EUCOM hizo público un vídeo en el que, según afirma, se capta el momento en que el Su-27 se topa con un dron estadounidense. En la descripción del vídeo se afirma que el avión ruso arrojó combustible delante del dron y golpeó su hélice.
El incidente provocó una oleada de comentarios jocosos y memes en las redes sociales de Internet. Sobre todo después de que se difundieran las imágenes de vídeo de la cámara del dron del momento en que los aviones rusos arrojan combustible sobre el dron estadounidense. Algunos bromistas describieron el incidente como “el Su-27 orinó sobre un dron estadounidense”.
El Ministerio de Defensa ruso, por su parte, negó que alguno de sus aviones entrara en contacto con el dron estadounidense. La agencia insiste en que el dron inició un vuelo descontrolado con pérdida de altitud y cayó al agua como resultado de una “maniobra brusca”.
Tras el incidente, el embajador ruso en Estados Unidos, Anatoly Antonov, fue convocado al Departamento de Estado estadounidense, donde, según él, tuvo lugar una constructiva conversación. El 15 de marzo, los ministros de Defensa ruso y estadounidense, Sergei Shoigu y Lloyd Austin, hablaron del incidente por teléfono. El Departamento de Estado estadounidense reconoció que el incidente no había sido intencionado, pero señaló su “potencial de escalada”.