Los paracaidistas rusos de la Unidad de Guardias Aéreas de Moscú están en Bielorrusia, informa Interfax, citando al servicio de prensa del Ministerio de Defensa ruso.
El jueves, junto con sus colegas bielorrusos, realizaron ejercicios para practicar el allanamiento a un edificio en el lugar de pruebas cerca de Brest.
Los militares rusos salieron en paracaídas del helicóptero Mi-8 MTV-5, allanaron, liberaron a los rehenes y despejaron el edificio tomado por un hipotético enemigo.
El “allanamiento urbano” es “uno de los ejercicios más difíciles”, mencionó el Ministerio de Defensa, y añadió que los ejercicios se realizaron bajo fuertes lluvias y vientos racheados.
Los ejercicios se realizaron en el marco de la Competición Internacional de Estrellas Polares del Ejército, que comenzó en Belarús el domingo 23 de agosto, en el punto culminante de las protestas masivas, cuando más de 200 mil personas salieron a las calles de todo el país.
La víspera, el presidente ruso Vladimir Putin anunció la formación de una “reserva” de agentes del orden público que pueden ser enviados a Belarús para ayudar a Alexander Lukashenko, que se enfrenta a la peor crisis política de los últimos 26 años.
La reserva fue creada a petición de Lukashenko, señaló el viernes el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov.
Esto se hizo “de conformidad con las obligaciones que se especifican para Rusia en dos tratados: el Tratado de Seguridad Colectiva y el Tratado sobre el Estado de la Unión”, expresó Peskov, añadiendo que las unidades rusas “en caso de extrema necesidad pueden prevenir acciones extremistas en la república”.
Peskov se negó a especificar el tamaño de la reserva y su composición: si incluye solo empleados de la Guardia Nacional Rusa, o incluso los militares.
“Rusia no ha interferido ni interfiere en los asuntos internos de Belarús”, indicó, añadiendo que el Kremlin supone que Belarús “no se enfrentará” a una situación en la que se necesite la asistencia militar de Rusia.