El primer ministro británico, Keir Starmer, declaró que estaba consternado por el ataque contra una sinagoga en Manchester y añadió que el hecho de que ocurriera en el día sagrado de Yom Kippur lo hacía “aún más horrible”.
La policía británica informó que cuatro personas resultaron heridas después de que, según los reportes, un automóvil atropelló a varios peatones y el atacante apuñaló a otras personas cerca de una sinagoga en Manchester, en el noroeste de Inglaterra, y que los agentes dispararon contra el presunto agresor.
