Un día después de que las representantes demócratas Rashida Tlaib de Michigan e Ilhan Omar de Minnesota ofrecieran una conferencia de prensa sobre las restricciones de su planeado viaje a Judea, Samaria e Israel, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, criticó a Tlaib en Twitter.
Trump, que ha criticado anteriormente a las dos congresistas en Twitter, escribió: “Lo siento, no creo en las lágrimas de la representante Tlaib. He observado su violencia, su locura y, lo que es más importante, sus palabras, durante demasiado tiempo. ¿Ahora lágrimas? Odia a Israel y a todo el pueblo judío. Ella es antisemita. Ella y sus 3 amigas son la nueva cara del Partido Demócrata. ¡Vive con ello!”.
Sorry, I don’t buy Rep. Tlaib’s tears. I have watched her violence, craziness and, most importantly, WORDS, for far too long. Now tears? She hates Israel and all Jewish people. She is an anti-Semite. She and her 3 friends are the new face of the Democrat Party. Live with it!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) August 20, 2019
Omar y Tlaib aparecieron en la conferencia de prensa con líderes judíos de sus distritos y pidieron a todos los miembros del Congreso que visitaran Judea, Samaria e Israel.
Tlaib dijo que “todos los estadounidenses deberían sentirse molestos” por la decisión de no dejarlos entrar.
La legisladora de Michigan lloró al recordar que visitó a su familia en Judea y Samaria, y vio que su madre tenía que “pasar por controles deshumanizadores, a pesar de ser ciudadana de Estados Unidos y estadounidense orgullosa”.
Tlaib se emocionó al contar cómo su “Sitty”, un término árabe de cariño para la abuela que se deletrea de diferentes maneras en inglés, la instó durante una llorosa llamada telefónica familiar a altas horas de la noche a que no se sometiera a lo que ellos consideraban circunstancias tan humillantes.
“Ella dijo que soy su sueño manifestado. Soy su ave libre”, recordó Tlaib. “Entonces, ¿por qué volvería a estar enjaulado e inclinarme cuando mi elección elevó su cabeza y le dio dignidad por primera vez?”.
A instancias del presidente Donald Trump, Israel denegó la entrada a los dos representantes musulmanes por su apoyo al movimiento de boicot dirigido por palestinos. Los dos son críticos francos de Trump y del trato que Israel da a los palestinos.
Fueron sometidos a una serie de tweets racistas de Trump el mes pasado, en los que les dijo que “regresaran” a sus países “rotos”. Ambas son ciudadanos estadounidenses.