Los vándalos han destrozado y desfigurado la tumba de Karl Marx en Londres, lo que el cementerio dijo que parecía ser un ataque deliberado contra la ideología del filósofo comunista.
Una placa de mármol con los nombres de Karl Marx y su familia, la parte más antigua y más frágil del monumento, fue golpeada repetidamente con un instrumento de metal contundente, dijo a la AFP, Ian Dungavell, quien dirige el fideicomiso del cementerio.
El daño fue descubierto el lunes, dijo.
“Parece que apuntaron especialmente al nombre de Karl Marx, por lo que no fue solo una destrucción aleatoria de un monumento, parece un ataque muy específico contra Karl Marx”, dijo Dungavell, director ejecutivo del Friends of Highgate Cemetery Trust, la entidad benéfica que administra el cementerio.

El filósofo revolucionario alemán Marx, que era judío, se mudó a Londres en 1849 y vivió en la capital británica durante el resto de su vida. Murió el 14 de marzo de 1883, a los 64 años.
El monumento de losa de granito en el norte de Londres, de 12 pies (3,7 metros) de altura y coronado por un busto de bronce de Karl Marx, fue financiado en 1956 por el Partido Comunista de Gran Bretaña.
La placa de mármol insertada que ha sido dañada proviene de la tumba original más simple.
Las letras y la mampostería sufrieron daños, especialmente alrededor del nombre de Marx, la fecha de la muerte de su esposa y el nombre de su nieto Harry Longuet, quien murió a la edad de cuatro años.
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“La idea de que puedes estar en desacuerdo con los pensamientos de alguien rompiendo un monumento parece una forma particularmente inarticulada de abordar el debate”, dijo Dungavell.
El monumento ha sido atacado antes. El busto fue arrancado, fue atacado con una bomba de tubo en la década de 1970 y ha sido embadurnado con pintura y eslóganes.
“Está marcada por la batalla y tiene todas las marcas de una vida rica y variada”, dijo Dungavell.
“No es irreparable pero nunca volverá a ser lo mismo”.
La tumba es un monumento catalogado de Grado I, lo que significa que es uno de los sitios más importantes de Gran Bretaña que debe protegerse y conservarse como patrimonio.