La organización nacional de inteligencia turca MIT ha proporcionado información adicional sobre las detenciones de individuos sospechosos de ser espías del Mossad. Según el MIT, el Mossad emplea tácticas de reclutamiento en las redes sociales, utilizando anuncios de trabajo vagos para establecer contacto inicial con posibles informantes.
Aquellos que responden a estos anuncios son luego solicitados para llevar a cabo diversas tareas a corto plazo, que incluyen “recopilación de información, investigación, fotografía y filmación de objetivos, vigilancia, colocación de dispositivos GPS en vehículos seleccionados, asaltos, robos, incendios provocados, intimidación y chantaje”, según ha afirmado el MIT.
Además, el Mossad supuestamente difunde desinformación a través de la creación de sitios web y periódicos en línea, y se comunica con sus reclutas a través de aplicaciones como Telegram y WhatsApp, según lo declarado por el MIT en un comunicado a la prensa local.
El MIT también señala que el Mossad utiliza intermediarios para realizar pagos en criptomonedas, a menudo relacionados con actividades de apuestas ilegales. Cuando identifican a reclutas particularmente hábiles, los agentes israelíes los llevan a hoteles de lujo, restaurantes y viajes, y someten a estos individuos a pruebas de polígrafo.
Según la información proporcionada por el MIT, los agentes del Mossad transportan dinero en efectivo de manera personal para recompensar a los informantes más valiosos, ocultándolo en bolsas con compartimentos secretos para eludir los controles de seguridad en los aeropuertos.
Cuando los informantes se encuentran con sus entrenadores, reciben sistemas de comunicación y entrenamiento en técnicas de comunicación clasificadas, además de ser formados en áreas como la vigilancia, documentación fotográfica, encubrimiento, elaboración de informes y seguridad operativa, según las afirmaciones de Turquía.
Además, el MIT sostiene que estos agentes también están involucrados en actividades como el tráfico y contrabando de personas desde Irán e Irak hacia Turquía, utilizan habilidades de hackers, localizan refugios seguros y alquilan ambulancias para llevar a cabo sus operaciones.