La oficina del gobernador informó que la presentación programada para el viernes por la noche fue cancelada “después de intensos llamados a protestas contra el concierto”. La gobernación argumentó que busca evitar manifestaciones alrededor del evento que acusen a Israel de genocidio y afecten a sus simpatizantes. Según el comunicado oficial, tales protestas colocarían a los participantes en una situación legal desfavorable y podrían generar agravios.
Además, se prohibieron concentraciones en las inmediaciones de la sala de conciertos en el distrito de Sisli durante la jornada. El cantante, de 86 años, declaró a la AFP que ha actuado en Turquía durante seis décadas y que se siente “profundamente sorprendido y entristecido por no poder encontrarse con su público, con el que siempre compartió valores de paz y fraternidad”.
Turquía, miembro de la OTAN, ha criticado con dureza a Israel por su intervención en Gaza durante la guerra con Hamás, calificándola de genocidio. El país ha suspendido el comercio con Israel, solicitado acciones internacionales en su contra y reclamado a las potencias mundiales que dejen de brindarle apoyo. Israel niega las acusaciones de genocidio.