ANKARA, Turquía – Los medios de comunicación turcos dicen que Turquía está lista para comenzar a realizar pruebas de los sistemas de defensa aérea S-400 de fabricación rusa comprados a Moscú, a pesar de las amenazas de sanciones de Estados Unidos.
El periódico Milliyet, que tiene estrechos vínculos con el gobierno, dijo el lunes que los militares están planeando probar los S-400 que actualmente están desplegados en una base aérea en las afueras de Ankara.
Turquía recibió este año dos baterías rusas S-400, desestimando las advertencias de Estados Unidos de que suponen una amenaza para la seguridad de la OTAN.
La compra del sistema ruso S-400 y su posterior entrega en julio ha sido una fuente importante de fricciones entre los aliados de la OTAN, Turquía y Estados Unidos.
Como resultado, Washington suspendió la participación turca en el programa multinacional de cazas de combate F-35.
Los legisladores estadounidenses han advertido de sanciones si Turquía activa el sistema.
Estados Unidos y otros países de la OTAN dicen que el S-400 ayudaría a la inteligencia rusa y comprometería el programa de cazas de combate F-35 dirigido por Estados Unidos.
El mes pasado, Estados Unidos dijo que Turquía se libraría de las sanciones en virtud de una ley de 2017 si no activa el sistema S-400.
Tras una reunión muy esperada entre Trump y Erdogan en la Casa Blanca, para abordar una crisis en las relaciones, Trump dijo que era “un gran fanático” del líder turco y que tuvieron un encuentro “maravilloso y productivo”.
Pero ambos líderes no lograron explicar en términos concretos cómo superar las crecientes diferencias que tienen en numerosas cuestiones, como la política de Siria y la compra por parte de Turquía del sistema ruso de defensa con misiles S-400.
“La adquisición por parte de Turquía de sofisticados equipos militares rusos, como el S-400, nos plantea algunos retos muy serios y estamos hablando de ello constantemente”, dijo Trump en una conferencia de prensa conjunta.