Se cree que la implicación del gobierno ucraniano en el atentado con coche bomba de agosto que mató a la periodista prorrusa Darya Dugina y a su padre, el nacionalista Alexander Dugin, fue autorizada por algunas facciones, según las agencias de inteligencia estadounidenses.
Según un informe publicado el miércoles por The New York Times, los funcionarios estadounidenses no tenían conocimiento de los preparativos del atentado y no ofrecieron ninguna información de inteligencia ni participaron de otra manera en el ataque. Estados Unidos reprendió a los funcionarios ucranianos después del asesinato, informó el sitio, citando a funcionarios anónimos, y no habría aprobado el ataque si hubiera estado al tanto de él de antemano.
Dugina murió al estallar un explosivo colocado en su todoterreno cuando viajaba a las afueras de Moscú. Ella conducía el vehículo de su padre, que según algunos funcionarios estadounidenses y rusos era el objetivo principal del atentado.
Los países occidentales respaldan a Dugin, ferviente defensor de la invasión rusa de Ucrania. Dugina fue sancionada por Estados Unidos en marzo por su trabajo como editora jefe de United World International, un sitio web que Estados Unidos calificó de fuente de desinformación. Dugina ha manifestado opiniones similares como comentarista en la televisión rusa.
Inmediatamente después del atentado, las autoridades rusas acusaron a Ucrania de ser responsable y nombraron a dos individuos ucranianos que, según ellos, participaron en su asesinato.
Mykhailo Podolyak, asesor presidencial de Ucrania, declaró al Times que su país no era responsable del asesinato, afirmando que “alguien como Dugina no es un objetivo táctico ni estratégico para Ucrania” y que esta tiene objetivos en su propio territorio.

Según el sitio, los funcionarios estadounidenses se negaron a confirmar si el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky ordenó el ataque o qué departamentos del gobierno ucraniano lo hicieron.
Los funcionarios también se negaron a decir quién en el gobierno estadounidense había censurado a Ucrania o a quién específicamente habían censurado.
Desde entonces, el gobierno estadounidense ha ayudado a Ucrania con asistencia militar y de inteligencia tras la invasión rusa de ese país en febrero. En septiembre, Ucrania protagonizó una exitosa contraofensiva tras perder terreno. En respuesta, Rusia anunció la anexión de cuatro distritos en el este de Ucrania, una medida que fue ampliamente denunciada por las naciones occidentales.