Ucrania ha identificado a más de 600 sospechosos de crímenes de guerra rusos y ha comenzado a procesar a unos 80 de ellos, según declaró el martes la principal fiscal de Kiev.
La lista de sospechosos incluye a “altos militares, políticos y agentes de propaganda de Rusia”, dijo la fiscal general Iryna Venediktova en una conferencia de prensa en La Haya.
Venediktova dijo que Estonia, Letonia y Eslovaquia habían decidido unirse a un equipo internacional de investigación en Ucrania, que fue formado originalmente por Ucrania, Lituania y Polonia en marzo para permitir el intercambio de información y la investigación de presuntos crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad.
Están trabajando con la Corte Penal Internacional (CPI), que inició su investigación sobre posibles crímenes de guerra en Ucrania a principios de marzo.
La oficina del fiscal de la CPI, Karim Khan, ha desplegado un equipo de 42 investigadores, expertos forenses y personal de apoyo en Ucrania, y Khan dijo el martes que la CPI estaba “trabajando para abrir una oficina en Kiev” para apoyar las investigaciones.
Venediktova dijo que el apoyo internacional era vital para los esfuerzos de Ucrania por investigar todos los posibles crímenes de guerra.
“Debemos recopilar y proteger todo de forma correcta. Debería ser una prueba aceptable en cualquier tribunal”, dijo la fiscal.
Rusia ha negado haber atacado a civiles o estar implicada en crímenes de guerra mientras lleva a cabo lo que denomina una “operación militar especial” en Ucrania.