Una exhibición de arte instalada en los terrenos del World Trade Center que presenta una escultura gigante de caramelos envuelta en la bandera de Arabia Saudita se reubicará tras las quejas de los grupos de víctimas del 9/11, dijo el lunes la agencia que supervisa el sitio.
La Autoridad Portuaria de Nueva York y Nueva Jersey confirmaron que la exhibición “Candy Nations” se trasladará al sistema de tren aéreo del aeropuerto Kennedy esta semana.
“Hemos estado en contacto con el Memorial del 9/11 y con varias partes interesadas, y en total colaboración con el artista se reubicará la exposición desde su ubicación actual”, dijo la Autoridad Portuaria en un comunicado. “Creemos que esta solución respeta las sensibilidades únicas del sitio y preserva la integridad artística de la exhibición”.
Cada una de las esculturas de dulces en la exhibición, creadas por el artista francés Laurence Jenkell y mostradas en más de 25 países, presenta banderas de países en la cumbre del G-20, incluida Arabia Saudita, de donde provinieron muchos de los secuestradores del 9/11.
A giant candy sculpture wrapped in the Saudi flag installed at 1 World Trade Center will be relocated following complaints from 9/11 victims groups https://t.co/CMsOQwSLrA pic.twitter.com/X7JejO2R0A
— TRT World (@trtworld) January 15, 2019
Una coalición de familiares de víctimas y sobrevivientes del 11 de septiembre publicó una declaración el lunes diciendo que la reubicación de la exhibición “es lo correcto”.
“La presencia de la escultura en este sitio, que representa la bandera de KSA (Reino de Arabia Saudita), es una afrenta indignante para la comunidad del 9/11 y para todos los demás estadounidenses que buscan justicia por los ataques contra nuestra nación el 11 de septiembre de 2001”, dijo el grupo 9/11.
Cerca de 3.000 personas murieron cuando aviones secuestrados fueron estrellados contra las torres originales del centro de comercio, el Pentágono y un campo de Pennsylvania. Quince de los 19 atacantes eran saudíes.
Cientos de familiares de víctimas y sobrevivientes heridos han demandado al gobierno saudí, diciendo que sus empleados a sabiendas asistieron a secuestradores que llevaron a cabo los ataques.
El gobierno saudí ha negado durante mucho tiempo cualquier participación en los ataques.