Miles de aves que migraban a través de una reserva natural en la costa del Mar Caspio de Irán han sido encontradas muertas, lo que ha desconcertado a los activistas medioambientales y ha fomentado una investigación sobre el tema.
La investigación del asunto confirmó las especulaciones del veterinario jefe de la provincia de Mazandaran, Seyed Hossein Razvani, de que las aves habían muerto por intoxicación alimentaria, específicamente por botulismo aviar, que se contrae por el consumo de gusanos infectados en correlación con el aumento de la temperatura del agua, según la BBC.
“El número de cadáveres creció diariamente en el transcurso de una semana de 2.000 a 6.000, y los funcionarios locales esperan encontrar otros 2.000 pronto”, informó el periódico Ebtekar, en relación con la península de Miankaleh.
La Organización Veterinaria Nacional y la Agencia de Protección Ambiental determinaron que se debían promulgar “medidas de contención sanitaria” dentro de la región, mientras que el departamento ambiental de Mazandaran prohibió la caza de estas aves migratorias considerando que su condición tiene el potencial de afectar la salud humana.
La reserva natural del humedal de Miankaleh, reconocida por las Naciones Unidas en 1979, es el hogar de casi 250.000 aves migratorias, principalmente pelícanos y flamencos, que migran a la península cada invierno para poner sus huevos.
Sin embargo, casi el 20 por ciento de la reserva de humedales se ha desecado, en parte debido al cambio climático y a la reducción de las precipitaciones, pero también debido a problemas causados por el hombre como la caza, la pesca, la deforestación y la alteración ilegal de los canales de agua.
“El uso del agua en el sector agrícola es insostenible y significa que no hemos podido adaptarnos a las condiciones actuales”, dijo Hossein Ali Ebrahimi, director del departamento de medio ambiente de la provincia de Mazandaran, al Tehran Times el verano pasado.