TEHERÁN, Irán – Azerbaiyán ha cerrado una mezquita vinculada al líder supremo de Irán, informó el martes la agencia de noticias iraní Tasnim, días después de que Teherán lanzara juegos de guerra cerca de su frontera común en una medida denunciada por Bakú.
“La mezquita y la oficina de representación de Seyyed Ali Akbar Ojaghnejad, representante del líder supremo [ayatolá] Ali Jamenei en Bakú, fueron selladas y cerradas hoy por orden de las autoridades de la República de Azerbaiyán”, dijo Tasnim, sin dar más detalles.
Ojaghnejad ocupa el cargo desde 1996, según el sitio web de su oficina, que se encuentra dentro de la mezquita.
El portavoz del Ministerio del Interior de Azerbaiyán, Eskhan Zahidov, dijo en un comunicado que la medida era necesaria debido a “un aumento de los casos de COVID-19 en varios lugares de Bakú”, y que el funcionamiento de la mezquita había sido “suspendido temporalmente”.
La embajada de Irán en Bakú dijo en un comunicado el martes por la noche que había hecho un seguimiento del asunto a través de los canales diplomáticos, añadiendo que no había habido ningún aviso previo de la medida.
Desde mediados de septiembre, las tensiones se han disparado entre los dos vecinos, que comparten una frontera de 700 kilómetros.
El viernes, las fuerzas terrestres del ejército iraní iniciaron maniobras cerca de la frontera, una medida criticada por el presidente azerbaiyano Ilham Aliyev.
“Todos los países pueden llevar a cabo cualquier ejercicio militar en su propio territorio. Es su derecho soberano. Pero, ¿por qué ahora, y por qué en nuestra frontera?”. dijo Aliyev a la agencia de noticias turca Anadolu.
Irán invocó su “soberanía” para desestimar las preocupaciones de Azerbaiyán.
“Irán no tolerará la presencia del régimen sionista cerca de nuestras fronteras”, dijo el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Saeed Khatibzadeh, en alusión al archienemigo de Irán, Israel.
Israel es uno de los principales proveedores de armas de Azerbaiyán, que el año pasado ganó una guerra de seis semanas con su vecina Armenia por la disputada región de Nagorno-Karabaj.
La portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Azerbaiyán, Leyla Abdullayeva, dijo el lunes que las afirmaciones de Irán carecían de fundamento.
“Rechazamos las acusaciones de la presencia de terceros cerca de la frontera azerbaiyano-iraní, tales acusaciones son totalmente infundadas”, dijo.
Otra manzana de la discordia reciente fue la decisión de Bakú de imponer impuestos aduaneros a los camiones iraníes que cruzan su territorio hacia Armenia.
Para evitarlo, el Ministerio de Carreteras iraní anunció el lunes el envío de una delegación a Ereván para discutir la finalización de una carretera que une directamente Irán con Armenia.
El comunicado decía que Azerbaiyán “controla actualmente 20 kilómetros de esta carretera de 400 kilómetros que va de Norduz a Ereván”.
Irán estaba “dispuesto a completar la parte restante de la carretera lo antes posible”, decía el comunicado, que calificaba la carretera de “estratégica” para el comercio iraní.