DUBAI, Emiratos Árabes Unidos (AP) – Un buque de carga de bandera emiratí se hundió el jueves frente a Irán en el Golfo Pérsico en medio de un mal tiempo, dijeron las autoridades, y los rescatistas intentan dar cuenta de los 30 miembros de su tripulación.
El capitán Nizar Qaddoura, director de operaciones de la compañía Salem Al Makrani Cargo, dijo a The Associated Press que el Al Salmy 6 se encontró con un clima agitado y tormentoso, y volcó.
Los rescatistas habían salvado a 16 miembros de la tripulación, dijo el capitán. Otros 11 habían logrado subir a una balsa salvavidas, mientras que una persona fue salvada por un petrolero cercano. Dos miembros de la tripulación seguían en el agua, dijo.
La tripulación estaba formada por ciudadanos de Sudán, India, Pakistán, Uganda, Tanzania y Etiopía, dijo Qaddoura. La embarcación se dirigía a Umm Qasr (Irak) y transportaba coches y otros cargamentos, dijo.
El buque se encontraba a unos 50 kilómetros (30 millas) de la costa de Asaluyeh, informó la agencia estatal de noticias IRNA. IRNA dijo que los rescatistas iraníes estaban tratando de llegar a la embarcación.
Las imágenes publicadas por la IRNA y la televisión estatal iraní coincidían con imágenes anteriores del Al Salmy 6, un portavehículos de carga rodada.
La 5ª Flota de la Armada estadounidense, que patrulla en Oriente Medio, no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios.
El Golfo Pérsico sigue siendo una vía fluvial importante para el comercio, desde los buques de carga que transbordan al resto del mundo hasta los envíos de energía de los Estados árabes del Golfo, ricos en petróleo. Los barcos que se hunden en la vía navegable siguen siendo increíblemente raros. Sin embargo, las tormentas de polvo y otras condiciones meteorológicas adversas han barrido la región a medida que las estaciones cambian de los meses relativamente fríos del invierno a los días abrasadores del verano.
La Organización Meteorológica de Irán informó de que el Golfo Pérsico había sido azotado por un clima severo a partir del miércoles, advirtiendo de que las fuertes ráfagas de viento interrumpirían las actividades marítimas en el golfo y dañarían las instalaciones en alta mar hasta el sábado. Se espera que la velocidad del viento supere los 70 km/h en la provincia iraní de Bushehr.