Estados Unidos ha impuesto recientemente sanciones a empresas y personas iraníes por la presunta adquisición de equipos destinados a programas de aviones no tripulados y armas de Irán.
La medida forma parte de la estrategia estadounidense para desenmascarar y desmantelar las redes de adquisiciones extranjeras que apoyan el complejo militar-industrial de Irán.
Acusaciones en Irán y Turquía
La Oficina de Control de Activos Extranjeros del Tesoro, en coordinación con el FBI, ha señalado a cuatro empresas y tres personas en Irán y Turquía por la compra de material para aviones no tripulados iraníes.
Entre las empresas sancionadas se encuentra el Centro de Investigación Científica y Tecnológica de Defensa y su empresa de adquisiciones Farazan Industrial Engineering Inc., junto con agentes de compras de las compañías.
La proliferación iraní de vehículos no tripulados
Brian Nelson, Subsecretario del Tesoro para Terrorismo e Inteligencia Financiera, ha declarado que “la bien documentada proliferación por parte de Irán de vehículos aéreos no tripulados y armas convencionales a sus representantes sigue socavando tanto la seguridad regional como la estabilidad mundial”.
Estas sanciones buscan limitar el acceso a cualquier propiedad o activo financiero que posean en Estados Unidos, así como impedir que empresas y compañías estadounidenses hagan negocios con ellos.
Limitar la capacidad iraní
Estados Unidos seguirá desenmascarando las redes de adquisiciones extranjeras en cualquier jurisdicción que apoye el complejo militar-industrial de Irán. Además, los funcionarios de defensa estadounidenses afirman que Irán está suministrando a Rusia aviones no tripulados para utilizarlos contra civiles, mientras el Kremlin presiona en su invasión de Ucrania.
Las tensiones entre Estados Unidos e Irán han empeorado tras meses de protestas antigubernamentales. Esta nueva ronda de sanciones pretende limitar la capacidad iraní para adquirir equipos y material que puedan utilizar en la producción de aviones no tripulados y armamento, y en consecuencia, reducir su capacidad para desestabilizar la región.