Esta vez, las tropas de Estados Unidos reaccionaron inmediatamente después de que las milicias chiítas iraquíes lanzaron cinco cohetes contra la gran base aérea de Ain Al-Assad en el oeste de Irak. El martes 3 de diciembre, aviones de la Fuerza Aérea de Estados Unidos atacaron una base en el complejo militar iraní de las Brigadas Al Quds cerca de Abu Kamal, en la frontera sirio-iraquí, y destruyeron sus lanzacohetes.
Con esta operación, Washington señaló a Teherán que la postura de falta de respuesta a la agresión iraní, incluyendo el ataque con misiles de crucero y aviones no tripulados de Irán contra el petróleo saudí el 14 de septiembre, había terminado. A partir de ahora, Estados Unidos responderá con fuerza a cada ataque de las fuerzas iraníes o pro iraníes contra objetivos estadounidenses o aliados en Oriente Medio. Por primera vez, aviones estadounidenses atacaron directamente una de las instalaciones militares iraníes de Al Quds en Siria, que hasta ahora solo habían sido atacadas por la fuerza aérea israelí.
Por lo tanto, este concurso ha experimentado un cambio radical. A partir de ahora, tanto las fuerzas aéreas de Estados Unidos como las de Israel pueden responder a las provocaciones iraníes, mientras que Teherán también puede empezar a responder cuando sus fuerzas son atacadas.
Mientras tanto, Irán ha aumentado su presencia militar en Siria. Fuentes rusas y sirias informan de que Irán ha desplegado un avanzado sistema de defensa aérea Bavar-373 en la gran base aérea T-4 siria al este de Homs. Este sistema tiene un alcance de 250 km y su radar controla un radio de 350 kilómetros. Un nuevo paraguas de defensa iraní cubre ahora todo el este de Siria, incluyendo la frontera con Irak, Deir ez-Zour y las tropas de Al Quds y las milicias iraquíes con base allí.
Fuentes militares occidentales definen al Bavar-373 como un híbrido desarrollado a partir de la tecnología de los sistemas de defensa aérea rusos S-300 y S-400. Es capaz de detectar e interceptar misiles de crucero y cazas furtivos avanzados como los F-35 y F-22 de Estados Unidos que sirven a las fuerzas aéreas de Estados Unidos e Israel.
Las fuentes militares de DEBKAfile señalan que dado que el T-4 es una base importante para los aviones y buques de guerra rusos, Irán habría necesitado el permiso del comando ruso en Siria antes de colocar el Bavar-737 allí. No hay confirmación disponible de Moscú sobre este despliegue.
Mientras tanto, las fuerzas especiales israelíes viajaron a Chipre esta semana para el cuarto ejercicio de las FDI en tres años de lucha en terreno rocoso y montañoso similar al del Líbano y Siria. Soldados de las unidades de élite Egoz, Maglan y Duvdevan de la Brigada de Comandos de las FDI participaron en el ejercicio, junto con los escuadrones de helicópteros de transporte de la fuerza aérea, un escuadrón de aviones no tripulados, la Unidad 669 de búsqueda y rescate y un escuadrón aéreo que simulaba aviones enemigos.