Un alto representante del Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán, cuya identidad permanece anónima, comunicó a The New York Times que Teherán muestra disposición para entablar diálogos con Estados Unidos. Según el informe, el ministro iraní de Relaciones Exteriores, Abbas Araghchi, estaría dispuesto a reunirse con el presidente Donald Trump para abordar un posible cese de hostilidades con Israel.
En contraste, el líder supremo de Irán, Alí Jamenei, ha manifestado públicamente su rechazo a cualquier tipo de negociación con Washington. Esta postura genera incertidumbre sobre la viabilidad de los acercamientos propuestos por el funcionario iraní.
Donald Trump, presidente de Estados Unidos, reveló a su equipo que autorizó planes para atacar a Irán, aunque espera evaluar si Teherán abandona su programa nuclear antes de emitir órdenes definitivas, según informó The Wall Street Journal. Fuentes cercanas a las deliberaciones confirmaron que Trump comunicó esta decisión a sus principales asesores el día anterior.
El mandatario estadounidense afirmó que, antes de los recientes ataques de Israel contra Irán, el régimen iraní estaba “a semanas” de poseer un arma nuclear. Ahora, Trump insiste en buscar una “victoria total” en lugar de un alto el fuego. Durante años, ha sostenido que impedir que Irán obtenga armamento nuclear constituye una prioridad.
Trump aclaró que aún no decide si ordenará ataques contra los sitios nucleares iraníes. Sin embargo, destacó la superioridad del equipo militar estadounidense, actualmente utilizado por Israel en sus ofensivas contra Irán. “No busco una pelea, pero si la opción es entre pelear o permitir un arma nuclear, hay que hacer lo necesario. Tal vez no sea necesario pelear, quizá termine rápido”, expresó el presidente.
El líder estadounidense señaló que Irán expresó interés en negociar directamente en la Casa Blanca, aunque Teherán desmintió esta afirmación. Trump reconoció que “es un poco tarde” para un encuentro, reiterando que su objetivo no es un cese al fuego, sino una “victoria total y completa”. En este punto, coincidió con la retórica del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y definió la victoria como la garantía de que Irán no desarrolle armas nucleares.
Trump desestimó rumores sobre divisiones entre sus seguidores respecto a un posible ataque a Irán. Afirmó que sus partidarios lo respaldan plenamente. Aunque reconoció que el comentarista conservador Tucker Carlson se opone a la intervención militar estadounidense, aclaró que Carlson comparte el objetivo de evitar que Irán obtenga un arma nuclear.