El líder supremo iraní, Ali Khameneí, advirtió a Estados Unidos de que “cualquier movimiento erróneo” contra el acuerdo nuclear, firmado en julio de 2015 entre Irán y seis grandes potencias, recibirá “una adecuada reacción”.
En un discurso ante responsables policiales, recogido por su página oficial, Khameneí aseguró que Washington muestra “maldad” con respecto al pacto a diario y quiere evitar el progreso científico de Irán imponiendo continuas sanciones.
El líder chií desempolvó el calificativo de “Gran Satán”, dado a Estados Unidos por el fundador de la República Islámica, el imán Ruhollah Khomeiní, y denunció que ese país es “el más malvado de los demonios”.
“Los enemigos deben saber que si la intimidación no funcionará nunca contra la República Islámica. Una retirada no tiene cabida en nuestras políticas cuando se trata de nuestros intereses nacionales”, subrayó.
Por ello, Khameneí instó al Gobierno iraní a demostrar a Washington que Irán “nunca se someterá a sus exigencias”.
Washington ha impuesto en los últimos meses sanciones contra individuos y entidades relacionados con el programa armamentístico de Teherán, al tiempo que ha pedido que se inspeccionen las instalaciones militares iraníes en el marco del acuerdo nuclear.
Las declaraciones del líder coinciden con el viaje del presidente iraní, Hassan Rohaní, a Nueva York para participar en la Asamblea General de la ONU, donde defenderá el pacto nuclear y las políticas de su país.
Antes de su salida hacia Nueva York, Rohaní afirmó que su visita es “una buena oportunidad para eliminar cualquier ambigüedad que exista en las mentes de los pueblos estadounidenses u occidentales” y contrarrestar la propaganda contra Irán.
El mandatario insistió asimismo en que el acuerdo nuclear es “beneficioso para la seguridad, la estabilidad y el desarrollo regional y mundial” y solo “unos pocos países” se oponen al pacto, entre ellos Estados Unidos.
Se espera que al margen de la Asamblea de la ONU se reúnan los ministros de Exteriores de Irán y del Grupo 5+1 (Estados Unidos, Rusia, China, Francia y Reino Unido más Alemania) para hablar sobre el pacto, que supuso el levantamiento de las sanciones internacionales contra Irán a cambio de que este país limitara su capacidad atómica.