Las autoridades iraníes arrestaron el sábado a los familiares de una periodista de Iran International como represalia por los reportajes del canal sobre la guerra entre Irán e Israel. El medio, con sede en Londres, informó que los paramilitares de la Guardia Revolucionaria se llevaron a la madre, el padre y el hermano menor de la presentadora a un lugar desconocido, con el objetivo de presionarla para que abandone su trabajo.
Iran International emitió un comunicado que condena con firmeza el secuestro de la familia de su periodista. El canal describió el acto como “un espantoso intento de toma de rehenes” diseñado para forzar la renuncia de su colega. Además, calificó la acción como una escalada alarmante en los esfuerzos del régimen iraní por silenciar voces disidentes y restringir el periodismo independiente.
El medio destacó que la periodista, cuya identidad no se reveló, recibió una llamada de su padre el sábado por la mañana. En la comunicación, él le suplicaba que renunciara a su puesto, mientras se escuchaban voces de agentes de seguridad en el fondo, indicándole qué decir. “Te he dicho mil veces que renuncies. ¿Qué otras consecuencias esperas?”, expresó el padre, según el relato del canal.
Este incidente refleja los constantes esfuerzos de Irán por reprimir a los periodistas, tanto dentro del país como en el extranjero, especialmente a aquellos con familiares en territorio iraní. Según el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ), Irán figura entre los países que más encarcelan a reporteros en el mundo. Los profesionales de la prensa enfrentan, en el mejor de los casos, severas restricciones en su labor.