Según informan los medios de comunicación iraníes el lunes, funcionarios iraníes afirman que han detenido a 10 espías israelíes en la provincia de Azerbaiyán Occidental.
Según la agencia de noticias semioficial Fars, los individuos estaban en comunicación con la organización de inteligencia Mossad y llevaron a cabo operaciones contra el personal de seguridad iraní.
Según el artículo, los cabecillas “cobraban por tomar imágenes que suministraban a los agentes del Mossad y luego incendiaban los coches y las casas de las personas vinculadas con la seguridad”.
De vez en cuando, Irán proclamará que ha detenido a alguien que cree que es un espía de una potencia extranjera como Estados Unidos o Israel, pero rara vez aportará pruebas que respalden estas acusaciones.
Además, altos funcionarios iraníes han afirmado recientemente que Estados Unidos e Israel están detrás de las protestas nacionales contra el trato que el gobierno da a las mujeres.
Irán anunció hace dos semanas que había capturado a un “espía sionista” que trabajaba de forma encubierta como comerciante en la provincia sureña de Kerman.
El Cuerpo de Guardias Revolucionarios Islámicos detuvo al espía después de que supuestamente conspirara para “socavar la seguridad” en Kerman. El sospechoso declaró que había hecho planes para reunirse con un agente israelí en una nación vecina para conseguir una nueva misión.
Los medios de comunicación iraníes declararon en julio que otra supuesta red de espionaje israelí formada por cinco personas había sido capturada en Irán, lo que supone la segunda detención de un grupo de este tipo revelada en Irán en una semana.
El sabotaje de las instalaciones nucleares y el asesinato del antiguo jefe del programa nuclear iraní han sido atribuidos a Israel en los últimos años. Aunque Jerusalén nunca ha asumido directamente la culpa, las pruebas apuntan a la ciudad.