El ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Hossein Amir-Abdollahian, dijo el martes que la República Islámica está dispuesta a negociar la reactivación del acuerdo nuclear de 2015 y la eliminación de las sanciones con las otras partes sobre la base de un “documento de septiembre”, informó la agencia de noticias Xinhua.
Amir-Abdollahian hizo estas declaraciones en una reunión a la que asistieron varios altos diplomáticos y académicos iraníes en Teherán, la capital iraní, al tiempo que destacó la determinación de la administración de “restaurar los derechos del pueblo iraní y levantar las sanciones impuestas al país”.
Con “documento de septiembre”, el canciller iraní se refiere al borrador final de un acuerdo preparado el otoño pasado como parte de las conversaciones de meses entre Estados Unidos e Irán en un intento por revivir el acuerdo nuclear, formalmente conocido como Plan Integral de Acción Conjunta (JCPOA, por sus siglas en inglés).
En 2018, el entonces presidente estadounidense, Donald Trump, se retiró del acuerdo y volvió a imponer sanciones a Teherán.
Irán respondió a la retirada de Trump del acuerdo nuclear de 2015 reduciendo su cumplimiento del acuerdo. El gobierno de Biden, sin embargo, intentó volver al acuerdo y mantuvo conversaciones indirectas con Irán para volver a cumplirlo.
Las negociaciones llegaron a un punto muerto a finales de septiembre, cuando Irán presentó una respuesta a una propuesta de la Unión Europea para reactivar el acuerdo. Un alto funcionario de la administración Biden dijo que la respuesta iraní “no es nada alentadora”.
Más tarde, un funcionario estadounidense afirmó que los esfuerzos por reactivar el acuerdo nuclear iraní de 2015 se han “estrellado contra un muro” debido a la insistencia de Irán en el cierre de las investigaciones del organismo de control nuclear de la ONU.
A pesar de la ruptura de las conversaciones, informes recientes indicaban que Estados Unidos e Irán habían mantenido conversaciones indirectas sobre un nuevo acuerdo.
Un funcionario estadounidense aclaró posteriormente que Estados Unidos e Irán no estaban discutiendo un acuerdo nuclear provisional, y que Washington se había limitado a transmitir a Teherán las medidas que podrían desencadenar una crisis y también las que podrían crear un mejor clima entre los antagonistas de siempre.
El secretario de Estado, Antony Blinken, negó posteriormente que se hubiera alcanzado un acuerdo entre la administración Biden y el gobierno iraní sobre el programa nuclear iraní.