Irán ha vuelto a desplegar vehículos aéreos no tripulados (drones) frente a Israel en Al-Dimas, cerca de la frontera entre Siria y el Líbano, después de que las Brigadas de la Guardia Revolucionaria de Al-Quds obtuvieran el permiso del gobernante sirio Bashar Assad. Se encuentra al oeste de Damasco y a 40 km de la frontera israelí, frente a las posiciones del monte Hermón de las FDI, según informan las fuentes militares y de inteligencia de DEBKAfile. El nuevo puesto de drones está integrado en un grupo de campamentos pertenecientes a la 4ª División del ejército sirio, que es la Guardia Republicana bajo el mando del hermano del presidente, Maher Assad.
Fuentes militares de DebKafile informan de que los iraníes se están trasladando a la pequeña base aérea siria de Al Sharae, a solo 20 km de la colina de Tal Al-Harara, que se encuentra a unos 40 km de la frontera con el Golán en el este de Israel.
Hace ocho meses, la fuerza iraní estacionada por primera vez en Al-Dimas sufrió un ataque aéreo israelí. Las Brigadas Al Quds tomaron represalias disparando un misil contra el centro de Israel. No hubo víctimas y tanto Teherán como Jerusalén se mantuvieron en silencio sobre este incidente. Luego, hace 10 días, los misiles de superficie israelíes destruyeron una nueva estación de observación que acaba de ser establecida por la inteligencia iraní en Tal Al-Harara. Desde este ataque, los drones iraníes fueron vistos aterrizando y despegando de la base aérea de Al Sharsae.
El mapa adjunto ilustra los esfuerzos adicionales que Teherán está haciendo para recuperar sus antiguas posiciones y encadenarlas a lo largo de toda la frontera entre Siria e Israel.
Los informes que salieron de Damasco esta semana revelan que los rusos han desactivado los avanzados sistemas de defensa aérea S-400 que protegen el centro militar sirio de investigación de armas Masyaf en el oeste. Algunas fuentes informan que Siria solo dispone ahora de sistemas S-300 contra los aviones de guerra israelíes que están equipados con medidas de evasión eficaces. No se ofrece ninguna explicación para estos movimientos militares, que con poca frecuencia son revelados por Moscú o Damasco.