El sábado, Irán prometió que se mantendría firme contra cualquier amenaza a sus fronteras, y emitió una advertencia a los EE.UU. y sus aliados en la región, después de que el presidente de los EE.UU., Donald Trump, dijera que los militares estaban “agrupados y armados” para atacar a Teherán por derribar un dron estadounidense el jueves.
“Cualquier error de los enemigos de Irán, en particular de Estados Unidos y sus aliados regionales, sería como disparar a un barril de pólvora que quemará hasta los cimientos a Estados Unidos, sus intereses y sus aliados”, dijo Abolfazl Shekarchi, portavoz principal de las Fuerzas Armadas iraníes, a la agencia de noticias semioficial Tasnim, informó Reuters.
“Independientemente de cualquier decisión que tomen… no permitiremos que ninguna de las fronteras de Irán sea violada. Irán se enfrentará firmemente a cualquier agresión o amenaza por parte de Estados Unidos”, dijo Abbas Mousavi, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores.
El derribo del dron, que Washington insiste en que se produjo en aguas internacionales, pero que Teherán dice que estaba dentro de su espacio aéreo, ha provocado un aumento de las tensiones entre los dos países tras una serie de ataques a petroleros que Estados Unidos y su fiel aliado, Arabia Saudí, han culpado a Irán.
Trump dijo el viernes que Estados Unidos estaba listo para tomar represalias contra la República Islámica, pero canceló los ataques 10 minutos antes de que se llevaran a cabo, después de que se le dijera que unas 150 personas podrían morir.
El ataque rustrado fue lo más cerca que ha estado Estados Unidos de un ataque militar directo contra Irán en el año transcurrido desde que la administración se retiró del acuerdo internacional de 2015 destinado a frenar el programa nuclear iraní y lanzó una campaña de creciente presión económica contra la República Islámica.
Trump tweeteó el viernes que los EE.UU. estaba listo para “tomar represalias anoche en 3 lugares diferentes cuando le pregunté, ¿cuántos morirán? Un general le dijo que 150 personas, y canceló los ataques por “no ser proporcional al derribo de dron”.
Trump tweeteó que Estados Unidos nunca permitirá que Irán tenga un arma nuclear. Pero dijo que no tiene prisa por responder a la caída del dron estadounidense sobre el Estrecho de Ormuz.
Dijo que las sanciones de Estados Unidos están paralizando la economía iraní y que se están añadiendo más.
Un funcionario de Estados Unidos, que no estaba autorizado a hablar públicamente de la operación y habló en condición de anonimato, dijo que los objetivos habrían incluido radares y baterías de misiles.
La rápida reversión fue un recordatorio del grave riesgo de conflicto militar entre las fuerzas estadounidenses e iraníes, ya que la administración Trump combina una campaña de “máxima presión” de sanciones económicas con una acumulación de fuerzas estadounidenses en la región. A medida que aumentaban las tensiones en las últimas semanas, ha aumentado el temor de que cualquiera de las partes pudiera cometer un grave error de cálculo que condujera a la guerra.