Los hospitales de Irán se enfrentan a una aguda escasez de personal médico y camas mientras el país se enfrenta a una poderosa segunda ola de la pandemia COVID-19, dijo el jueves un alto funcionario del grupo de trabajo anti coronavirus de Teherán.
Irán, el país de Oriente Medio más afectado por la pandemia, comenzó a relajar su bloqueo a mediados de abril.
Pero una segunda ola de infecciones surgió a principios de junio y ha demostrado ser mucho más grave que la primera, dijo Reza Jalili-Khoshnood, que está infectado, según informó la agencia de noticias semioficial ISNA.
Irán registró 13.608 muertes relacionadas hasta el jueves, incluyendo 198 en las 24 horas previas, según la portavoz del Ministerio de Salud, Sima Sadat Lari, hablando en la televisión estatal.
Jalili-Khoshnood fue citado diciendo que en un hospital – el Shohada de Teherán, donde está hospitalizado – 172 miembros del personal médico se han infectado o están cuidando a miembros de la familia infectados. Dijo que también había escasez de camas, incluidas las de cuidados intensivos.
Sus comentarios contrastan con las garantías periódicas del presidente Hassan Rouhani de que el Irán cuenta con suficientes suministros de personal e instalaciones médicas.
Sadat Lari dijo a la televisión estatal que el número total de casos diagnosticados en el país había alcanzado los 267.061, un aumento de 2.500 en las últimas 24 horas.
Mientras luchan por frenar la propagación de la COVID-19, a las autoridades iraníes les preocupa que medidas más duras contra él puedan arruinar una economía que ya se tambalea por las sanciones de Estados Unidos.