TEHERÁN, Irán (AP) – El primer estudio sobre la seguridad y la eficacia de la vacuna contra el coronavirus en Irán comenzó el martes, informó la televisión estatal, y se espera que docenas de personas reciban la vacuna desarrollada internamente en el país más afectado de Oriente Medio.
La vacuna, producida por Shifa Pharmed, parte de un conglomerado farmacéutico estatal, es la primera en el país en llegar a las pruebas con humanos. El presidente iraní Hassan Rouhani ha dicho que Irán está cooperando con un “país extranjero” para producir otra vacuna que se espera que sea probada en voluntarios humanos en febrero, sin ofrecer más detalles.
Irán ha luchado por detener el peor brote de virus de la región, que ha infectado a más de 1,2 millones de personas y ha matado a casi 55.000.
El estudio, un ensayo clínico de fase 1, inscribirá a un total de 56 voluntarios para recibir dos inyecciones de la vacuna iraní en un plazo de dos semanas, según Hamed Hosseini, director del ensayo clínico, cuyos resultados se anunciarán aproximadamente un mes después de la segunda inyección. Tres personas recibieron las primeras inyecciones el martes en una ceremonia en un hotel de Teherán a la que asistió el ministro de salud del país. Las autoridades esperan que la vacuna salga al mercado a finales de la primavera de 2021.
“Estoy feliz de que el proceso científico se llevó a cabo de manera adecuada”, dijo Tayebeh Mokhber, hija del presidente del Grupo Farmacéutico Barekat, que fue la primera en ser inyectada. “Espero que la conclusión sea la salud para nuestro pueblo”.
El tratamiento, denominado Coviran, es una vacuna inactivada, lo que significa que está hecha de un coronavirus debilitado o muerto por sustancias químicas, similar a la forma en que se hacen las inmunizaciones contra la polio. Las principales vacunas occidentales, como la vacuna fabricada por Pfizer y su socio alemán BioNTech, utilizan una tecnología más reciente y menos probada para atacar la proteína de punta del coronavirus mediante el ARN.
No obstante, dado que los progresos en la investigación de vacunas en Irán son lentos a medida que los países occidentales conceden la aprobación para el uso de vacunas en casos de emergencia y ponen en marcha campañas de inoculación masiva, las autoridades iraníes han insistido en la necesidad de importar vacunas.
Las autoridades iraníes han alegado repetidamente que las duras sanciones estadounidenses socavan sus esfuerzos por comprar vacunas fabricadas en el extranjero e inocular a sus ciudadanos.
Irán retiene las rutas de las vacunas importadas, incluso a través de COVAX, un programa internacional diseñado para distribuir vacunas contra el coronavirus a los países participantes de todo el mundo. El lunes, Irán dijo que espera que un grupo de benefactores con sede en EE.UU. envíen miles de vacunas contra el coronavirus de Pfizer en las próximas semanas.