Irán está revelando su propio ejército de tanques mientras las naciones occidentales se preparan para suministrar a Ucrania carros de combate avanzados.
Irán exhibió un gran número de robots-tanque en miniatura de cuatro y seis ruedas, teledirigidos y armados con diverso armamento de pequeño calibre.
No es nada nuevo. La dictadura afirma haber incorporado “inteligencia artificial” y tecnología innovadora a las máquinas, aunque lleva años desarrollándolas. Entre los nuevos dispositivos hay coches teledirigidos con AK-47 montados en ellos, así como posibles funciones limitadas de inteligencia artificial.
Esta semana, un informe de la Agencia de Noticias Fars, afiliada al Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI), hablaba de este nuevo ejército de tanques. En él se afirmaba que la industria de la “República Islámica” se dedica a la producción de nuevo material militar.
No se trata de una estrategia novedosa para la República Islámica; como consecuencia de las sanciones, que prohíben las actuales ventas de grandes sistemas de defensa a Irán, el país construyó esta industria nacional.
Irónicamente, Teherán ha estado regalando aviones no tripulados a Rusia, lo que supone un nuevo paso para la reputación y el complejo industrial militar de Irán. Según Fars, Irán está realizando progresos significativos mediante la instalación de nuevas tecnologías en una serie de industrias.
¿En qué nuevas tecnologías militares se está concentrando Irán?
Este énfasis en la tecnología militar de vanguardia coincide con el 44 aniversario de la Revolución Islámica del régimen.
La investigación afirmaba: “Hemos estudiado la capacidad de las industrias de defensa de la República Islámica de Irán para diseñar y producir vehículos de inteligencia artificial”.
AI es ostensiblemente un término para la capacidad de “aprendizaje” de los ordenadores en sistemas militares o de control de armas. Cuando se utiliza esta forma de aprendizaje profundo, los usuarios pueden ser capaces de hacer clic en una pantalla para ordenar a la máquina que destruya o explore un objetivo haciendo que lo reconozca automáticamente.
Aunque parte de esta tecnología se basa en algoritmos y otros programas, no toda ella es genuinamente inteligencia artificial. Irán, sin embargo, quiere afirmar que está a la altura tanto de las naciones occidentales como de sus rivales, como Israel.
Según la investigación, “la comprensión de la inteligencia artificial es una de las ciencias más recientes que ha podido demostrar su utilidad en todos los campos, especialmente en el ámbito militar, durante las últimas décadas. En los últimos años, esta investigación ha sido utilizada por las fuerzas armadas de todo el mundo, como demuestran los numerosos robots y drones.
Estos drones son vehículos no tripulados, comúnmente denominados robots terrestres o UGV. Los pequeños robots conocidos como UGV están equipados con electroópticos, armamento, o ambos, que pueden emplearse en combate. Los robots y vehículos no tripulados son útiles para explorar regiones potencialmente minadas. También pueden transportar ocasionalmente a soldados heridos o suministrar equipos a las fuerzas que participan en tiroteos.
Además, son útiles para las patrullas fronterizas cuando los soldados pueden quedar bajo el fuego de francotiradores; el robot puede conducir con seguridad y realizar la tarea en lugar del soldado.
Una de las áreas más significativas de aplicación de esta ciencia en las fuerzas armadas iraníes, según la investigación, ha sido el uso de la inteligencia artificial en vehículos robotizados, proyectiles de artillería, simuladores y drones.
Según el informe, las fuerzas terrestres iraníes han desarrollado y construido vehículos teledirigidos equipados con IA para la guerra irregular.
El Nazir es un enorme vehículo de seis ruedas que tiene aproximadamente el tamaño de un oso o un elefante pequeño. Es la primera generación de vehículos no tripulados iraníes y existe desde hace unos diez años. También existe una variante de cuatro ruedas. También puede circular por distintos tipos de terreno gracias a su “chasis flexible”. Según el artículo, tiene un motor eléctrico y puede recorrer hasta 2 kilómetros.
Irán ha afirmado que puede equiparse con un sistema de armas de 7,62 mm y dispone de óptica diurna y nocturna para la observación. Puede transportar mercancías y alimentos militares y pesa 600 kg.
El Haider, en comparación, es un vehículo bastante más compacto que se fabricó en 2018. Tiene seis ruedas y mide menos de un metro, aproximadamente la longitud de un AK-47. Según el estudio, puede emplearse como “francotirador, terrorista suicida, lanzador de minas o reconocimiento”. Además, puede conectarse a otros vehículos. La investigación afirmaba que era posible coordinar muchos robots Haider en una red robótica para llevar a cabo operaciones de combate multilaterales.
Irán afirma haber construido un “robot suicida” que puede embestir vehículos blindados enemigos, “como tanques y vehículos blindados de transporte de personal”, mientras se camufla. Irán experimentó una curva de aprendizaje similar con los drones: tras desarrollarlos, los cargó de explosivos para crear drones kamikaze que entregó a Rusia.
Según la investigación, “los diseñadores y operadores de operaciones pueden utilizar estos robots suicidas para abrir brechas en las trincheras enemigas y destruir a los altos mandos del enemigo”.
Irán también ha afirmado que el Haider se desarrolló como reacción a los enormes tanques y columnas de vehículos que poseían los adversarios de Irán. A diferencia del Nazir, supuestamente creado durante el conflicto con el ISIS, esta arma estaba destinada a enfrentarse a las fuerzas estadounidenses en Irak y Siria, así como a las de otros aliados de Estados Unidos como Israel y Arabia Saudita.
El Haider aparece en la historia con un AK-47 montado al revés. Tiene sentido montar un AK-47 en el camión porque se dice que puede disparar en cualquier clima. Pero sigue sin estar claro cómo la colocación al revés permite al usuario apuntar correctamente.
Al igual que el Haider, el Caracal tiene seis ruedas y puede equiparse con armas. Según el artículo, se trata de la iteración más reciente del ejército iraní de minirobots de IA, que se mostró en 2019.
Según el estudio, “Caracal es un robot terrestre inteligente que utiliza un sistema de suspensión independiente”. Caracal es capaz de desplazarse a una velocidad máxima de 30 km/h y puede mantener libres las manos de los comandantes para operaciones tácticas.
Es un vehículo bastante básico capaz de transportar diversas armas “ligeras y semipesadas”. Además, cuenta con un “sistema inteligente de control remoto con telémetro láser”.
Se desconoce de qué es capaz este sistema “inteligente”. Otros UGV comparables disponen de sistemas de ayuda a la localización de rutas. Otra incógnita es si Irán importa algunos de los procesadores, ruedas y otras tecnologías utilizadas para crear estos sistemas.
Contrariamente a lo que Irán presume de fabricar toda esta tecnología localmente, se ha descubierto que los drones iraníes contienen piezas diminutas procedentes de todo el mundo.