Irán y sus aliados han estado contrabandeando armas en Siria, escondiéndolas en envíos de ayuda humanitaria tras el terremoto ocurrido a principios de año, de acuerdo con una evaluación de los servicios de inteligencia estadounidenses.
Documentos filtrados en Discord revelan la operación
El Washington Post citó un informe clasificado compartido en Discord, donde recientemente han circulado documentos sensibles del Gobierno de EE. UU. El contrabando incluye armas pequeñas, munición y drones, transportados en convoyes desde Irak por milicias respaldadas por Irán y la Fuerza Quds.
La inteligencia indica que Irán aprovechó el terremoto del 7 de febrero, que dejó miles de muertos en Siria y Turquía, para organizar el tráfico de armas. Los convoyes de ayuda eran utilizados para apoyar futuros ataques contra fuerzas estadounidenses en Siria.
Un oficial de la Fuerza Quds instó a un paramilitar iraquí a esconder armas dentro de la ayuda legítima. Otro oficial iraní mencionó una lista de “cientos” de vehículos de transporte que cruzaron a Siria desde Irak tras el terremoto.
Negación de las Fuerzas de Movilización Popular iraquíes
Las Fuerzas de Movilización Popular iraquíes (PMF), respaldadas por Irán, negaron haber aprovechado los envíos de ayuda para transportar armas a Siria. Un alto funcionario iraquí calificó de “falsas” las acusaciones de contrabando en el documento estadounidense.
El funcionario argumentó que no era necesario un pretexto para enviar armas a Siria, ya que las fronteras están abiertas y sufren el ingreso de ilegales a través de la frontera siria.
Un funcionario militar israelí confirmó la participación de la Fuerza Quds en el contrabando, sin dar más detalles.
Israel intensifica persecución de envíos de armas a aliados iraníes
El informe sugiere que los envíos de ayuda complican la persecución de Israel de entregas de armas a proxies iraníes. Sin embargo, es probable que las fuerzas israelíes sigan trabajando para interceptarlos, necesitando confirmación de inteligencia más estricta antes de atacar supuestos envíos de ayuda.
Israel ha llevado a cabo cientos de ataques contra objetivos en Siria, incluidos aeropuertos en Damasco y Alepo, pero rara vez los reconoce. También ha atacado bases de grupos aliados de Irán, como Hezbolá, que apoyan al presidente sirio Bashar Assad.
El Estado judío considera a Irán su mayor enemigo y su expansión en Siria como una amenaza a su seguridad nacional. Irán, por su parte, niega las acusaciones occidentales de que persiga una
bomba nuclear y defiende su apoyo a grupos como Hezbolá como una respuesta legítima a las amenazas en la región.
Estados Unidos mantiene presencia en Siria
Actualmente, Estados Unidos tiene aproximadamente 900 soldados en puestos en todo el noreste de Siria para mantener la presión sobre los restos del grupo Estado Islámico y apoyar a las Fuerzas Democráticas Sirias dirigidas por kurdos, que controlan la mayor parte del noreste. Además, mantiene la guarnición de Al Tanf en el sur de Siria, que ha sido blanco de presuntos ataques de drones iraníes.
En marzo, un contratista militar estadounidense en Siria fue asesinado por un avión no tripulado, lo que provocó un ataque de represalia estadounidense contra las fuerzas vinculadas a Irán en el país.
Reacciones internacionales y preocupaciones
El informe del Washington Post llega después de que Reuters informara el mes pasado de que Irán ha transportado armas y material militar a Siria en vuelos de ayuda humanitaria tras el reciente terremoto. Pocos días después del terremoto, un oficial militar israelí advirtió que si Irán enviaba armas a sus representantes regionales bajo la apariencia de ayuda humanitaria a Siria, las Fuerzas de Defensa de Israel no dudarían en atacar.
En el pasado reciente, Israel ha sido señalado por varios ataques aéreos contra presuntos envíos de armas iraníes disfrazados de productos aparentemente inofensivos. Estas acciones reflejan la creciente preocupación de Israel por la expansión de Irán en Siria y sus posibles repercusiones en la estabilidad regional y la seguridad nacional israelí.