Irán confirmó una nueva ronda de conversaciones nucleares con EE. UU. en Omán el 26 de abril, tras avances técnicos y diplomáticos en Roma.
Técnicos de Irán y EE. UU. preparan reunión nuclear en Omán
Abbas Araghchi, ministro de Relaciones Exteriores de Irán, anunció que la tercera ronda de negociaciones nucleares con Estados Unidos se realizará el 26 de abril de 2025 en Omán, con la presencia del enviado estadounidense Steve Witkoff. Equipos técnicos de ambos países sostendrán encuentros previos para preparar el contenido de las discusiones.
Según Araghchi, la segunda ronda de negociaciones, realizada el 19 de abril en la embajada de Omán en Roma, mostró avances importantes en un entorno diplomático positivo. “Las conversaciones están progresando, y espero que estemos en una mejor posición tras las reuniones técnicas”, declaró en la televisión estatal iraní.
Estados Unidos no emitió comentarios oficiales tras las cuatro horas de negociaciones desarrolladas en la zona de Camilluccia, Roma. Las sesiones contaron con la mediación del ministro de Relaciones Exteriores de Omán, Badr al-Busaidi.
En esa segunda ronda, los equipos negociadores intercambiaron propuestas durante más de cuatro horas en la residencia del embajador omaní, donde Araghchi y Witkoff también se reunieron brevemente de forma directa al final del encuentro.
Conversaciones buscan establecer límites al programa nuclear
Las discusiones apuntan a limitar el programa nuclear iraní, que se ha expandido desde la ruptura del acuerdo de 2015, conocido como Plan de Acción Integral Conjunto (JCPOA). Actualmente, Irán enriquece uranio hasta un 60%, nivel cercano al 90% necesario para fabricar armas nucleares.
Informes de la Agencia Internacional de Energía Atómica (IAEA) indican que Teherán dispone de suficiente material para fabricar múltiples bombas si decide hacerlo. El director de la IAEA, Rafael Grossi, viajó a Teherán el 16 de abril y se reunió con Araghchi y el presidente Masoud Pezeshkian.
Grossi destacó la importancia de que Irán coopere con la IAEA para facilitar una solución diplomática. Recordó que Irán ha restringido el acceso de inspectores desde 2018, año en que Donald Trump retiró a EE. UU. del JCPOA.
Washington busca un nuevo marco que imponga límites estrictos al enriquecimiento y garantice la no proliferación. Witkoff representa esa línea, y según su portavoz, el objetivo es acordar un calendario que cumpla con los parámetros definidos por Trump.
Datos clave sobre las negociaciones nucleares Irán-EE. UU.
- La tercera ronda se celebrará el 26 de abril en Omán con mediación omaní.
- Irán enriquece uranio al 60%, cerca del umbral militar del 90%.
- El acuerdo busca limitar el programa nuclear y levantar sanciones.
- Desde 2018, Irán limita el acceso de la IAEA a sus instalaciones.
- Trump exige un acuerdo con restricciones más estrictas que el JCPOA.
Omán como sede de reuniones entre Teherán y Washington
La elección de Omán como sede refleja su historial como intermediario entre Irán y Estados Unidos, que no tienen relaciones diplomáticas desde 1979. La primera reunión en Muscat, el 12 de abril, incluyó contactos indirectos y un breve diálogo directo.
Durante esa primera ronda, se discutieron posibles límites al enriquecimiento de uranio y mecanismos para aliviar sanciones. Irán insistió en mantener el enfoque exclusivamente en el tema nuclear, excluyendo misiles balísticos y apoyo a grupos armados regionales.
Araghchi cuenta con el respaldo del líder supremo Alí Jamenei, quien le otorgó plena autoridad para negociar. El 13 de abril, Jamenei declaró que las negociaciones deben respetar las “líneas rojas” de Irán, que incluyen mantener un programa nuclear civil.
En contraste, Witkoff, un empresario sin experiencia en diplomacia nuclear, representa la visión de Trump de un “acuerdo de Trump”, con límites estrictos al enriquecimiento y una estructura de verificación más rigurosa.
Tensiones militares y sanciones económicas enmarcan el diálogo
Las negociaciones ocurren en un contexto de alta tensión regional. Trump ha reiterado que, si no se alcanza un acuerdo, EE. UU. podría lanzar ataques aéreos contra instalaciones nucleares iraníes, en posible coordinación con Israel.
El 14 de abril, Trump expresó su frustración con el ritmo del proceso y aseguró que pronto tomará una decisión al respecto. Por su parte, Irán advirtió que cualquier ataque militar provocará una respuesta severa, incluyendo represalias contra países vecinos con bases estadounidenses.
Rusia y China han mostrado apoyo al proceso diplomático. Lavrov se reunió con Araghchi el 18 de abril en Moscú, y China pidió a Washington mayor “sinceridad” en las negociaciones. Europa occidental, con Francia, Alemania y el Reino Unido a la cabeza, sigue de cerca las conversaciones.
Desde la salida de EE. UU. del JCPOA, Irán ha enfrentado duras sanciones que afectan sus exportaciones de petróleo. Aunque China sigue comprando crudo iraní, lo hace con descuentos. Analistas como Hossein Mousavian alertan que exigir el desmantelamiento total del programa nuclear podría frustrar las negociaciones.