El ministro de Asuntos Exteriores de Israel, Gideon Sa’ar, señaló el lunes que Turquía coopera con Irán en el contrabando de dinero para financiar a Hezbolá. Durante una reunión con un grupo bipartidista de senadores estadounidenses en el Ministerio de Asuntos Exteriores, Sa’ar advirtió que Teherán ha intensificado sus esfuerzos para enviar fondos a la organización terrorista libanesa y que Ankara juega un papel clave en ese proceso.
“Irán está incrementando el contrabando de dinero hacia Líbano para restaurar el poder de Hezbolá”, afirmó Sa’ar, según su oficina. “Esto ocurre a través de diversos canales, incluida Turquía, que participa activamente en la operación”.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, ha condenado a Israel desde el inicio de su ofensiva en Gaza el año pasado y ha respaldado abiertamente a Hamás, grupo vinculado a la Hermandad Musulmana, al igual que el partido AKP de Erdogan. No obstante, su postura sobre las acciones de Israel contra Hezbolá ha sido menos contundente, incluso tras la muerte del líder de la organización, Hassan Nasrallah, en septiembre de 2024.
Analistas sostienen que Turquía podría aprovechar la coyuntura para ampliar su influencia en la región frente a Irán. A pesar de sus relaciones complejas, ambos países han chocado en diversos temas, especialmente la guerra en Siria. Además, Estados Unidos ha acusado a bancos turcos de financiar a Hezbolá.
Las Fuerzas de Defensa de Israel han denunciado que Teherán utiliza aviones civiles para trasladar dinero a Beirut con el fin de armar a Hezbolá. El programa nuclear iraní también fue discutido en la reunión. Sa’ar alertó sobre «desarrollos preocupantes» y atribuyó los avances nucleares de Irán a sus intentos de compensar los golpes sufridos por el llamado Eje de la Resistencia en el último año.
El domingo, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, también trató el tema nuclear con el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, en su visita a Irán. Informes de inteligencia de EE. UU., citados por *The Washington Post*, indican que Israel evalúa atacar el programa nuclear iraní este año.
Irán, que ha prometido la destrucción de Israel, insiste en que su programa nuclear tiene fines pacíficos. Sin embargo, la Agencia Internacional de Energía Atómica (OIEA) ha señalado que Teherán enriquece uranio a niveles sin aplicación civil y ha obstaculizado la labor de los inspectores internacionales. Según *The New York Times*, información de inteligencia estadounidense sugiere que científicos iraníes encubiertos exploran formas de desarrollar rápidamente un arma nuclear si sus líderes lo ordenan.
Otro punto discutido en la reunión de Sa’ar con la delegación estadounidense fue la posible retirada de tropas de EE. UU. en Siria. El ministro israelí consideró inoportuna la medida debido a la persistente lucha contra el ISIS y la “nueva situación” tras la caída del régimen de Bashar al-Asad, que amenaza la autonomía kurda.
La delegación estadounidense estuvo encabezada por los senadores Lindsey Graham y Dan Sullivan, e incluyó a Sheldon Whitehouse, Richard Blumenthal, Joni Ernst, Adam Schiff y Andy Kim.