La semana pasada, el Comité Ministerial de Adquisiciones de Defensa y Equipamiento de las Fuerzas de Defensa de Israel aprobó la adquisición de 12 nuevos helicópteros de transporte para la Fuerza Aérea de Israel. Tras años de retrasos, los nuevos helicópteros sustituirán a los antiguos CH-53 Yasur, que serán retirados del servicio.
Pero la decisión más importante del comité ministerial fue la aprobación de un presupuesto global de adquisiciones de casi 5.000 millones de NIS, que saldrá del presupuesto de defensa. El presupuesto de adquisiciones es para prepararse para una posible confrontación con Irán.
El presupuesto se destina a varios tipos de sistemas avanzados de armas de ataque de alta precisión y potencia. Las adquisiciones se realizarán en las industrias de defensa de Estados Unidos e Israel.
En la lista de adquisiciones figuran también misiles de defensa, además de las capacidades de intervención de corto alcance de la Cúpula de Hierro, así como otros sistemas y armamento, principalmente para defenderse de misiles y cohetes.
La importancia de las adquisiciones que han sido presupuestadas y dirigidas por el Ministerio de Defensa es una verdadera preparación para una confrontación con Irán. Esto podría ser el resultado de un posible ataque a las instalaciones nucleares de Irán y sus ramificaciones, incluyendo un ataque iraní en respuesta con la ayuda de Hezbolá y organizaciones palestinas.
En otro escenario, el fracaso de las conversaciones sobre el acuerdo nuclear en Viena motivaría a Irán a escalar la situación en todo Oriente Medio, incluso contra Israel, como respuesta al fracaso de las sanciones de por vida en su contra.
El presupuesto para adquisiciones de defensa aprobado la semana pasada representa casi el 10 % de todo el presupuesto de defensa, con la mayor parte del presupuesto de adquisiciones asignado a la confrontación con Irán y sus organizaciones proxy.